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miércoles, 8 de enero de 2014

Gustavo Ayón intenta no perder la serenidad

NUEVA YORK - Sentado al final del banquillo visitante, el mexicano Gustavo Ayón esperaba sólo recibir una pequeña señal o escuchar la voz del entrenador para finalmente aportar su granito de arena.
Gustavo Ayon
Gustavo Ayón no ha terminado de mostrar su calidad con Atlanta Hawks
Tranquilamente, apoyaba a sus compañeros cuando se dirigían al banquillo durante cada receso de acción y aplaudía cada buena jugada a lo largo de la noche. En un partido cerrado la noche del lunes en el Barclays Center, el entrenador Mike Budenholzer de nuevo dejó al nativo de Tepic con los brazos abiertos por la tercera vez consecutiva. Junto al nombre de Ayón estaban aquellas tres letras, las más desagradables para un NBA, DNP o no jugó por decisión de su entrenador, como es conocido por sus siglas en inglés. Aunque Budenholzer tuvo varias oportunidades de darle minutos, no lo hizo antes de que los Hawks (18-17) sufrieran su tercer revés al hilo y cuarto en seis partidos desde la desafortunada baja del dominicano Al Horford. Aunque Pero Antic, quien asumió la tarea de pivot titular en la ausencia de Horford, tenía tres faltas en su contra restando cinco minutos y medio en la primera mitad, el discípulo de Greg Popovich nunca se dirigió a la última silla de la banca para ingresar a Ayón, especialmente contra un equipo de Brooklyn que no tenía una figura defensiva imponente en el poste, no lo hizo. Cuando Antic fue penalizado con su quinta falta 45 segundos tras el inició del último parcial, no lo hizo. Serenamente, Ayón se dirigió al camerino visitante pensado cuando será la próxima vez que se le presente unos minutos de juego. Calmadamente, el nayarita y ancla de la selección tricolor que clasificó al Mundial de España, expresó como decisiones como esa tomada por su coach afectan su ánimo. "Ataca tu confianza como jugador", confesó en un aparte con ESPNDeportes.com al final del partido. "Pero es así. Es una situación muy difícil pero no puedo hacer nada ni decir nada porque (como) todo es aquí, todo lo toman muy amargo". Ser sobrepasado por otro jugadores no es una novedad. En su breve estadía en Milwaukee, en su contra tuvo una multitud de pivots y ala-pivots en el plantel y simplemente no habían suficiente minutos dentro los 48 que carga un juego en la NBA para que se pudiera destacar. Sin embargo, todo apuntaba a su favor al llegar a Atlanta y de hecho aunque sufrió una lesión en el hombro derecho que retraso su debut por cinco partidos, Budenholzer estaba muy a gusto con la "energía" y "tipo de competitividad" que Ayón le demostraba. Con la inesperada lesión sufrida por Horford dos semanas atrás, la ilusión de quizás, por el resto de la campaña llevar el rol de titular estaba a su favor. "El entrenador esta buscando la manera de suplirlo. Es un jugador muy importante para este equipo", desctacó Ayón. Pero tal parece, por el momento, que Ayón no figura ser parte del plan de su coach y admitió que encuentra que esta situación "muy pesada" a lo que vivió con los Bucks. "Son situaciones muy difíciles y pues bueno estoy tranquilo. No puedo hacer absolutamente nada", afirmó. "Seguir trabajando, seguir tratando de mantenerme físicamente y esperar que se me den buenos minutos a la hora de jugar. Si puedes jugar pero te dan tres o cuatro minutos pero no te sirven de nada. Espero que se llegue la oportunidad de jugar muchos minutos y poder tener ritmo de juego".
Gustavo Ayon
El originario de Nayarit, México, fue el Jugador Más Valioso del torneo FIBA América de 2013
Aunque si pudo haberse convertido en el Jugador Más Valioso del torneo FIBA Americas con un promedio de 17.2 puntos y 8.4 rebotes por partido, su actuación con los Hawks no refleja la mitad de lo que fue capaz en esos 10 partidos en Caracas; sin embargo, Ayón acepta que su mundo dentro de la NBA es muy distinto comparado con aquel donde puso a México en el mapa del baloncesto internacional. "Son situaciones muy diferente", explicó. "Allá eres la referencia de tu equipo y aquí no. Aquí vienes a trabajar. Vienes hacer el otro rol totalmente diferente. Así que no es duro. No comparo la situación que tuve en el verano a esta situación porque no es para nada igual". La gran diferencia en los numeritos no es la razón de porque Ayón apenas ha jugado por lo menos seis minutos en cada uno de los cuatro partidos antes de calentar el banquillo en los últimos tres partidos. En 13 partidos esta campaña, Ayón lleva un balance de tres puntos y cuatro rebotes. Inició dos de los primero nueve antes de sufrir una lesión el tobillo izquierdo, dejándolo fuera de cinco encuentros. Antic ha llevado un balance 4.6 unidades y 2.9 rebotes en 24 partidos. En los tres partidos como el centro titular, Antic promedia 11 puntos, 5.7 rebotes sobre 22:31 minutos en la pista. Adaptarse ha sido duro pero la tranquilidad lo mantiene lejos de crear una distracción. Tranquilamente esperará, sea este jueves ante Indiana o el próximo partido que le llegue.

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