Nuevas evidencias se la ponen difícil a Pete Rose
Durante 26 años, Pete Rose ha mantenido una historia: él nunca apostó en el béisbol mientras era un jugador.
Sí, admitió en 2004, después de casi 15 años de negaciones, que había realizado apuestas de béisbol, pero él insistió en que fueron sólo cuando era gerente.
Pero nuevos documentos obtenidos por Outside the Lines indican que Rose apostó ampliamente en el béisbol -y sobre los Cincinnati Reds- cuando él acumuló los últimos éxitos de su carrera en 1986. Los documentos van más allá de la evidencia presentada en 1989 en el informe Dowd que provocó el destierro de Rose y proporcionan el primer registro escrito de que Rose apostó cuando aún estaba en el campo.
"Esto lo confirma. Esto cierra la puerta", dijo John Dowd, el ex fiscal federal que dirigió la investigación de la MLB.
Los documentos son copias de las páginas de un cuaderno incautado en la casa del exasociado de Rose, Michael Bertolini durante una incursión del Servicio de Inspección Postal de Estados Unidos en octubre de 1989, casi dos meses después de que Rose fuera declarado inelegible de forma permanente por las Grandes Ligas. Su autenticidad ha sido verificada por dos personas que participaron en la redada, que fue parte de una investigación por fraude electrónico y no estaba relacionada con los juegos de azar. Durante 26 años, las notas se han mantenido bajo sello ordenada por la corte y están guardadas actualmente en la oficina de los Archivos Nacionales de Nueva York, donde las autoridades han declinado las solicitudes de hacerlas públicas.
Rose, a través de su abogado, Raymond Genco, emitió un comunicado: "Desde que presentamos la aplicación a principios de este año, nos comprometimos con MLB a que no íbamos a hacer comentarios sobre asuntos específicos relacionados con la reincorporación. Necesito mantenerlo. Para esta seguro, estoy dispuesto de sentarme con [el comisionado de MLB] Rob Manfred y contarle toda mi historia - el bien y el mal - de mi largo viaje personal en el béisbol. Esa reunión probablemente vendrá en algún momento después de la pausa por el Juego de Estrellas. Por lo tanto, en este punto, no es apropiado comentar sobre ningún detalle". El abogado de Bertolini, Nicolás De Feis, dijo que su cliente "no está interesado en hablar con nadie sobre estas cuestiones".
Dowd, quien revisó los documentos ante la solicitud de Outside the Lines, dijo que sus investigadores habían intentado pero no logró obtener los registros de Bertolini, creyendo que sería la última pieza en su caso de que Rose estaba apostando con los corredores de apuestas de la mafia conectada en Nueva York. Dowd y su equipo habían utilizado el testimonio del apostador Ron Peters de que Rose apostó en los Rojos entre 1984 y 1986, pero no existía la documentación escrita. Dowd también tuvo testimonio y una conversación telefónica grabada entre Bertolini y otro asociado de Rose, Paul Janszen, que estableció que Bertolini había realizado apuestas para Rose.
Pero Dowd nunca tuvo el tipo de documentos que podrían cimentar esa parte de su caso, sobre todo a los ojos de los aficionados que querían ver a Rose de regreso a las Grandes Ligas.
"Sabíamos que [Bertolini] registró las apuestas, y que él apostó a sí mismo, pero nunca tuvimos sus registros. Tratamos de conseguirlos. Él se negó a entregárnoslos", dijo Dowd. "Esta es la última pieza del rompecabezas en una operación de apuestas de Nueva York con el crimen organizado. Y, por supuesto, [Rose] apuestó mientras que él era un jugador".
Los documentos obtenidos por Outside the Lines, que reflejan los registros de apuestas desde marzo hasta julio de 1986 no muestran ninguna evidencia de que Rose, que era un jugador-manager en 1986, apostara en contra de su equipo. Ellos proporcionan una instantánea vívida de cómo la extensa relación de apuestas de Rose era en 1986:
• En el tiempo cubierto en el cuaderno, de marzo a julio, Rose apostó al menos por un equipo de Grandes Ligas en 30 días diferentes. Es imposible contar el número exacto de veces que apostó en los juegos de béisbol porque las anotaciones no todos los días son legibles.
• Sin embargo, en 21 de esos días está claro que él apuestó en el béisbol, que apostó por los Rojos, incluyendo en partidos en los que jugó.
• La mayoría de las apuestas, independientemente del deporte, eran alrededor de 2000 dólares. La mayor apuesta individual era de $ 5,500 en los Celtics de Boston, una apuesta que perdió.
• Rose apostó mayormente en el baloncesto colegial y profesional, perdiendo $ 15,400 en un día de marzo. Eso ocurrió durante su peor semana en un período de cuatro meses, cuando perdió $ 25,500.
Dowd dijo que deseaba haber tenido las notas de Bertolini en 1989, pero él no las necesitaba para justificar el destierro de Rose. Según la Regla 21 de MLB: "Cualquier jugador, árbitro, club, liga oficial o empleado, que apostara cualquier suma a algún partido de béisbol en relación con el cual el apostador tiene el deber de actuar serán declarados inelegibles de forma permanente".
Pero los partidarios de Rose han basado parte de su caso para que se le reincorpore en su afirmación de que él nunca apostó mientras era un jugador o en contra de su equipo, diciendo que los pecados que cometió como gerente no deben disminuir lo que hizo como jugador.
"La regla dice, si usted apuesta, no dice si a favor o en contra. Es otro dispositivo a favor de Pete para tratar de excusar lo que hizo", dijo Dowd. "Pero cuando apostó, se marcó. Puso su interés financiero por delante de los Rojos, y punto".
Las opciones de Rose, quien jugó 72 partidos en 1986, no son muy grandes. En marzo de este año, solicitó a Manfred su reintegro. Dowd se reunió recientemente con el CIO y vicepresidente ejecutivo de administración de MLB, John McHale Jr., quien encabeza la revisión de la solicitud de reincorporación de Rose. El lunes por la mañana, los funcionarios de MLB se negaron a comentar sobre las notas.
En abril, Rose reiteró su negativa, esta vez en el programa de radio ESPN Nueva York 98.7 FM de Michael Kay, de que no apostó en el béisbol mientras fue jugador. "Nunca aposté como jugador. Eso es un hecho", dijo.
Sí, admitió en 2004, después de casi 15 años de negaciones, que había realizado apuestas de béisbol, pero él insistió en que fueron sólo cuando era gerente.
Pero nuevos documentos obtenidos por Outside the Lines indican que Rose apostó ampliamente en el béisbol -y sobre los Cincinnati Reds- cuando él acumuló los últimos éxitos de su carrera en 1986. Los documentos van más allá de la evidencia presentada en 1989 en el informe Dowd que provocó el destierro de Rose y proporcionan el primer registro escrito de que Rose apostó cuando aún estaba en el campo.
"Esto lo confirma. Esto cierra la puerta", dijo John Dowd, el ex fiscal federal que dirigió la investigación de la MLB.
Los documentos son copias de las páginas de un cuaderno incautado en la casa del exasociado de Rose, Michael Bertolini durante una incursión del Servicio de Inspección Postal de Estados Unidos en octubre de 1989, casi dos meses después de que Rose fuera declarado inelegible de forma permanente por las Grandes Ligas. Su autenticidad ha sido verificada por dos personas que participaron en la redada, que fue parte de una investigación por fraude electrónico y no estaba relacionada con los juegos de azar. Durante 26 años, las notas se han mantenido bajo sello ordenada por la corte y están guardadas actualmente en la oficina de los Archivos Nacionales de Nueva York, donde las autoridades han declinado las solicitudes de hacerlas públicas.
Rose, a través de su abogado, Raymond Genco, emitió un comunicado: "Desde que presentamos la aplicación a principios de este año, nos comprometimos con MLB a que no íbamos a hacer comentarios sobre asuntos específicos relacionados con la reincorporación. Necesito mantenerlo. Para esta seguro, estoy dispuesto de sentarme con [el comisionado de MLB] Rob Manfred y contarle toda mi historia - el bien y el mal - de mi largo viaje personal en el béisbol. Esa reunión probablemente vendrá en algún momento después de la pausa por el Juego de Estrellas. Por lo tanto, en este punto, no es apropiado comentar sobre ningún detalle". El abogado de Bertolini, Nicolás De Feis, dijo que su cliente "no está interesado en hablar con nadie sobre estas cuestiones".
Dowd, quien revisó los documentos ante la solicitud de Outside the Lines, dijo que sus investigadores habían intentado pero no logró obtener los registros de Bertolini, creyendo que sería la última pieza en su caso de que Rose estaba apostando con los corredores de apuestas de la mafia conectada en Nueva York. Dowd y su equipo habían utilizado el testimonio del apostador Ron Peters de que Rose apostó en los Rojos entre 1984 y 1986, pero no existía la documentación escrita. Dowd también tuvo testimonio y una conversación telefónica grabada entre Bertolini y otro asociado de Rose, Paul Janszen, que estableció que Bertolini había realizado apuestas para Rose.
Pero Dowd nunca tuvo el tipo de documentos que podrían cimentar esa parte de su caso, sobre todo a los ojos de los aficionados que querían ver a Rose de regreso a las Grandes Ligas.
"Sabíamos que [Bertolini] registró las apuestas, y que él apostó a sí mismo, pero nunca tuvimos sus registros. Tratamos de conseguirlos. Él se negó a entregárnoslos", dijo Dowd. "Esta es la última pieza del rompecabezas en una operación de apuestas de Nueva York con el crimen organizado. Y, por supuesto, [Rose] apuestó mientras que él era un jugador".
Los documentos obtenidos por Outside the Lines, que reflejan los registros de apuestas desde marzo hasta julio de 1986 no muestran ninguna evidencia de que Rose, que era un jugador-manager en 1986, apostara en contra de su equipo. Ellos proporcionan una instantánea vívida de cómo la extensa relación de apuestas de Rose era en 1986:
• En el tiempo cubierto en el cuaderno, de marzo a julio, Rose apostó al menos por un equipo de Grandes Ligas en 30 días diferentes. Es imposible contar el número exacto de veces que apostó en los juegos de béisbol porque las anotaciones no todos los días son legibles.
• Sin embargo, en 21 de esos días está claro que él apuestó en el béisbol, que apostó por los Rojos, incluyendo en partidos en los que jugó.
• La mayoría de las apuestas, independientemente del deporte, eran alrededor de 2000 dólares. La mayor apuesta individual era de $ 5,500 en los Celtics de Boston, una apuesta que perdió.
• Rose apostó mayormente en el baloncesto colegial y profesional, perdiendo $ 15,400 en un día de marzo. Eso ocurrió durante su peor semana en un período de cuatro meses, cuando perdió $ 25,500.
Dowd dijo que deseaba haber tenido las notas de Bertolini en 1989, pero él no las necesitaba para justificar el destierro de Rose. Según la Regla 21 de MLB: "Cualquier jugador, árbitro, club, liga oficial o empleado, que apostara cualquier suma a algún partido de béisbol en relación con el cual el apostador tiene el deber de actuar serán declarados inelegibles de forma permanente".
Pero los partidarios de Rose han basado parte de su caso para que se le reincorpore en su afirmación de que él nunca apostó mientras era un jugador o en contra de su equipo, diciendo que los pecados que cometió como gerente no deben disminuir lo que hizo como jugador.
"La regla dice, si usted apuesta, no dice si a favor o en contra. Es otro dispositivo a favor de Pete para tratar de excusar lo que hizo", dijo Dowd. "Pero cuando apostó, se marcó. Puso su interés financiero por delante de los Rojos, y punto".
Las opciones de Rose, quien jugó 72 partidos en 1986, no son muy grandes. En marzo de este año, solicitó a Manfred su reintegro. Dowd se reunió recientemente con el CIO y vicepresidente ejecutivo de administración de MLB, John McHale Jr., quien encabeza la revisión de la solicitud de reincorporación de Rose. El lunes por la mañana, los funcionarios de MLB se negaron a comentar sobre las notas.
En abril, Rose reiteró su negativa, esta vez en el programa de radio ESPN Nueva York 98.7 FM de Michael Kay, de que no apostó en el béisbol mientras fue jugador. "Nunca aposté como jugador. Eso es un hecho", dijo.
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