SANTO DOMINGO. El Pabellón de la Fama del Deporte Dominicana
albergará en su morada a uno de los lanzadores quisqueyanos más
sobresalientes de las dos últimas décadas.
Se trata de Ramón Martínez, uno de los serpentineros que tienen honor de ganar 20 partidos en una temporada de Grandes Ligas y miembro de un selecto grupo de lanzadores que ganaron al menos 100 partidos. El otrora pitcher estelar de los Dodgers no pudo estar presente por compromisos de trabajo en los Estados Unidos, pero prometió asistir a su ceremonia de exaltación y anuncio que su hermano Pedro pidió ser su edecán.
Es un ganador de 135 encuentros con apenas 88 derrotas en una fructífera carrera de 13 años en Liga Mayor, tras debutar el 13 de agosto de 1988.
Ramón terminó con efectividad colectiva de 3.67 y 1,427 ponches en 1,895.2 tercios de entradas lanzadas. Sus triunfos constituyen la cuarta mejor marca histórica entre los dominicanos, sólo detrás de Juan Marichal, su hermano Pedro y Bartolo Colón.
Martínez, quien fue presentado este jueves en un acto celebrado en el Salón de Conferencias del Pabellón de la Fama, abrazará la inmortalidad el domingo 19 de este mes. Fue electo por el Comité Permanente del Pabellón de la Fama y su exaltación se enmarca dentro del 48 Ceremonial que iniciará a las 11:00 de la mañana del día 19, en el auditorio del Pabellón de la Fama del Centro Olímpico Juan Pablo Duarte.
Debutó en las ligas mayores en 1988 con los Dodgers de Los Ángeles y tres temporadas después ya formaba parte de la élite de los lanzadores de la Liga Nacional al ganar 20 partidos (con sólo seis derrotas), excelente efectividad de 2.92 y 223 ponches en la estación de 1990. Tuvo cuatro temporadas de al menos 15 victorias, incluyendo la de 20 y dos de 17, así como ocho estaciones con 10 o más juegos ganados. Comandó la liga en juegos completos en una ocasión-
Al final de esa actuación del 90 que incluyó un partido de 18 ponches, el nativo de Manoguayabo fue votado para el premio Cy Young de la Liga y terminó en un honroso segundo lugar, además de que fue segundo en ponches propinados de la liga.
También asistió al Juego de Estrellas. Un sólido abridor durante un período de 8 a 10 termporadas, Pedro Jaime también tiene el mérito de haber lanzado un partido sin hit, hazaña conseguida el 14 de julio de 1995 contra los Marlins de la Florida. Fue el lanzador abridor de los Dodgers en el día inaugural de las campañas del 92, 95 y 98. En una
Hermano mayor de otro futuro inmortal, Pedro Martínez, Ramón fue un pitcher de relevancia de los Esquivadores hasta 1988 cuando una lesión en el manguito rotador y el desgarro de un cartílago llevaron a los Dodgers a no ejercer una opción de 5.6 millones de dólares.
Eso lo llevó a firmar con los Medias Rojas de Boston, comenzando la campaña del 99 en liga menor, pero en la que volvió a lanzar en rotación junto a su hermano pedro, “As para entonces de la rotación de Medias Rojas. Ese año tuvo foja de 3-1 y 3.05 de efectividad y terminó con registro de 10-8 la campaña siguiente (2001).
En su corta etapa en la pelota profesional de invierno de República Dominicana, Ramón ganó nueve partidos con sólo una derrota, como miembro de los Tigres del Licey. Su efectividad colectiva fue de 1.43 en 15 salidas como abridor. Lanzó un total de 131 entradas, permitiendo 73 imparables
La vegana Andrea Hernández en judo
SANTO DOMINGO. Andrea Hernández volverá a darle preminencia a la disciplina del judo cuando sea exaltada en el 48 Ceremonial del pabellón de la Fama el próximo 19 de este mes.
Hernández fue escogida para su exaltación por el Pabellón de la Fama del Deporte Dominicano, convirtiéndola en la segunda mujer judoca que logra tal distinción. Emulará a Dulce María Piña, quien tuvo el honor de ser la primera mujer en la exaltación del 2012.
"ES un orgullo y un honor ser tomada en cuenta para algo tan grande como la inmortalidad del deporte. Esta eleccion indica que uno subirá el ultimo escalón de toda una carrera y que esfuerzo valió la pena," comentó Hernández, durante la presentación ayer en el local del Pabellón de la Fama. "Me siento feliz, no voy a esconder que esperaba este momento y ha llegado en un buen momento," agregó la ex judoca.
La ganadora de medalla de oro en los Juegos Centroamericanos y del Caribe será instalada en el templo sagrado del deporte nacional junto a los ex peloteros profesionales Ramón Martínez y Moisés Alou, la otrora astro del baloncesto internacional Teresa Durán, el ex estrella de las selecciones nacional de softbol Josué Polanco, los propulsores José Joaquín Puello, ex presidente del Comité Olímpico Dominicano y de la Odecabe, y Alejandro Tejeda, ex jugador y entrenador de la selección de mayores de baloncesto.
Hernández es considerada entre las mejores atletas de todos los tiempos en su deporte, que colocará a su quinto inmortal en el Pabellón de la Fama. Los otros son Radhamés Lora Salcedo, Juan Chalas, Mamoru Matsunaga y Dulce María Piña.
Su logro en los Santiago 86 la convirtieron en la primera judoka femenina que ganaba una medalla de oro en Juegos Centroamericanos y del Caribe. Se impuso en la división de los 72 kilogramos, derrotando en la final a Idalia Hernández, de Cuba, históricamente una potencia a nivel continental.
Hernández siguió elevando su nivel y ganando medallas casi en cada evento internacional en que representó a República Dominicana. La vegana subiría al podio en unos Juegos Panamericanos cuando peleó la final de los 66 kilogramos en la versión de Indianápolis 87, Estados Unidos. Fue derrotada en una reñida pelea por Sandra Greaves, de Canadá.
Esa plata también la marcó como la primera mujer con una medalla en Juegos Panamericanos. Tras un inesperado y extenso retiro, Andrea regresó a la competición con una presea de oro en 72 kilogramos, durante el III Campeonato Centroamericano y del Caribe celebrado en el país en 1997.
Volvió a sobresalir a nivel a nivel de los Juegos Centroamericanos y del Caribe cuando se adjudicó la medalla de plata en Maracaibo, Venezuela, sede de la cita regional en 1998. Perdió la final ante la cubana Daima Beltrán.
Luego del retiro definitivo se convirtió en una notable dirigente del judo en su natal La Vega. El acto de exaltación de Andrés Hernández, Puello, Tejeda, Alou, Durán, Martínez y Polanco tendrá lugar el domingo 19 a partir de las 11:00 de la mañana, en el auditorio principal del Pabellón de la Fama del Deporte Dominicano, ubicado en el Centro Olímpico Juan Pablo Duarte.
Josué Polanco en softbol
SANTO DOMINGO. Después de ofrecer lo mejor de su talento al deporte dominicano en las disciplinas de softbol a nivel internacional y localmente en el béisbol, Josué Polanco verá cumplido el sueño de cada atleta.
Polanco fue escogido para formar parte de la clase de inmortales a ser exaltados el domingo 19 de este mes, durante el 48 Ceremonial de la Fama, entidad que hizo pública su elección en un encuentro con los periodistas celebrado este jueves en el salón de conferencias del Pabellón de la Fama, con el respaldo de Café Santo Domingo, Critical Power, S.R.L., Ferquido y el Banco Popular Dominicano.
El nativo de Luperón, Puerto Plata, brilló como pocos durante 17 largos como miembro de las selección nacional de softbol, sobresaliendo como uno de los más excelsos bateadores de todo el continente.
"Gracias por tomar mi trabajo, mi trayectoria como atleta en consideracion. Hoy entiendo que valio la pena hacer el trabajo y representar dignamente a nuestro pais. Valio la pena esforzarse y hasta vivir alejado de la familia, que es la gran sacrificada en la vida de un atleta. Agradesco al pais que supo depositar en uno la confianza de representar a la patria," declaro Josue.
El hoy entrenador principal de la selección nacional comenzó a mostrar destellos de peligroso bateador y gran defensor de la tercera base en los torneos de béisbol de la capital, por los años de 1978 con los equipos Brugal y Jaime Pérez. Después jugaría con el Manicero, Superintendencia de Seguros, Honda, Colchón King y sería la clave para que la Fuerza Aérea Dominicana construyera una dinastía en los campeonatos de béisbol y softbol de los Juegos Deportivos militares.
Comenzó a representar al país en el Centroamericano y del Caribe de Softbol celebrado en las ciudades colombianas de Medellín y Cartagena de Indias, donde ayudó al equipo nacional a conquistar la medalla de oro.
Un año después asistió en Mundial de Michigan, Estados Unidos, donde República Dominicana logró la quinta posición respaldada, entre otros, por sobresalientes actuaciones de Josué.
Polanco compitió asimismo en el Panamericano de Softbol del 85 disputado en Medellín y en 1986 fue un miembro prominente del seleccionado dominicano que ganó la medalla de oro en los Juegos Centroamericanos y del Caribe de Santiago 86.
Asistió a los Juegos Panamericanos de Indianápolis 87, Estados Unidos, así como al Campeonato Centroamericano y del Caribe de Durango, México, donde el país logró un quinto lugar y una medalla de oro, respectivamente. En tierras aztecas fue escogido como parte del equipo “Todos Estrellas” y terminó entre los mejores bateadores del certamen.
En el 89 fue el tercera base titular del seleccionado que ocupó la sexta posición en el Panamericano de Paraná, Argentina y en el 91 participó en el Campeonato Centroamericano de Valencia, Venezuela, y los Juegos Panamericanos de La Habana, Cuba.
En Valencia fue líder de cuadrangulares y carreras remolcadas, lo que le mereció el galardón de Jugador Más Valioso, además de ayudar al seleccionado tricolor a ganar la medalla de plata.
Estuvo en el Panamericano de Monterrey, 93 (México) y ese mismo año ayudó a su selección a ganar la medalla de plata en los Juegos Centroamericanos y del Caribe de Ponce, Puerto Rico.
Polanco, quien nació el 9 de abril de 1959, fue también a los Juegos Panamericanos de Mar del Plata 95, en Argentina, y en el 97 fue pieza clave en la plata lograda por el país en el Centroamericano y del Caribe de Cartagena de Indias.
Otros eventos de gran relevancia para Polanco fueron el Panamericano de Softbol de Valencia 98 (Venezuela) con un saldo de una medalla de bronce para República Dominicana, la primera ganada por el país en un evento continental propio de la disciplina.
También, en los Juegos Centroamericanos y del Caribe del mismo año en Maracaibo, Venezuela, donde los dominicanos perdieron la medalla de oro ante los locales en “muerte súbita”. Polanco terminó como líder en jonrones y vueltas remolcadas.
Se retiró como jugador de la selección nacional en los Juegos Panamericanos de Winnipeg 99, en Canadá. Desde entonces ha estado ligado a diferentes selecciones de mayores, principalmente como máximo entrenador, logrando resonantes victorias internacionales.
Se trata de Ramón Martínez, uno de los serpentineros que tienen honor de ganar 20 partidos en una temporada de Grandes Ligas y miembro de un selecto grupo de lanzadores que ganaron al menos 100 partidos. El otrora pitcher estelar de los Dodgers no pudo estar presente por compromisos de trabajo en los Estados Unidos, pero prometió asistir a su ceremonia de exaltación y anuncio que su hermano Pedro pidió ser su edecán.
Es un ganador de 135 encuentros con apenas 88 derrotas en una fructífera carrera de 13 años en Liga Mayor, tras debutar el 13 de agosto de 1988.
Ramón terminó con efectividad colectiva de 3.67 y 1,427 ponches en 1,895.2 tercios de entradas lanzadas. Sus triunfos constituyen la cuarta mejor marca histórica entre los dominicanos, sólo detrás de Juan Marichal, su hermano Pedro y Bartolo Colón.
Martínez, quien fue presentado este jueves en un acto celebrado en el Salón de Conferencias del Pabellón de la Fama, abrazará la inmortalidad el domingo 19 de este mes. Fue electo por el Comité Permanente del Pabellón de la Fama y su exaltación se enmarca dentro del 48 Ceremonial que iniciará a las 11:00 de la mañana del día 19, en el auditorio del Pabellón de la Fama del Centro Olímpico Juan Pablo Duarte.
Debutó en las ligas mayores en 1988 con los Dodgers de Los Ángeles y tres temporadas después ya formaba parte de la élite de los lanzadores de la Liga Nacional al ganar 20 partidos (con sólo seis derrotas), excelente efectividad de 2.92 y 223 ponches en la estación de 1990. Tuvo cuatro temporadas de al menos 15 victorias, incluyendo la de 20 y dos de 17, así como ocho estaciones con 10 o más juegos ganados. Comandó la liga en juegos completos en una ocasión-
Al final de esa actuación del 90 que incluyó un partido de 18 ponches, el nativo de Manoguayabo fue votado para el premio Cy Young de la Liga y terminó en un honroso segundo lugar, además de que fue segundo en ponches propinados de la liga.
También asistió al Juego de Estrellas. Un sólido abridor durante un período de 8 a 10 termporadas, Pedro Jaime también tiene el mérito de haber lanzado un partido sin hit, hazaña conseguida el 14 de julio de 1995 contra los Marlins de la Florida. Fue el lanzador abridor de los Dodgers en el día inaugural de las campañas del 92, 95 y 98. En una
Hermano mayor de otro futuro inmortal, Pedro Martínez, Ramón fue un pitcher de relevancia de los Esquivadores hasta 1988 cuando una lesión en el manguito rotador y el desgarro de un cartílago llevaron a los Dodgers a no ejercer una opción de 5.6 millones de dólares.
Eso lo llevó a firmar con los Medias Rojas de Boston, comenzando la campaña del 99 en liga menor, pero en la que volvió a lanzar en rotación junto a su hermano pedro, “As para entonces de la rotación de Medias Rojas. Ese año tuvo foja de 3-1 y 3.05 de efectividad y terminó con registro de 10-8 la campaña siguiente (2001).
En su corta etapa en la pelota profesional de invierno de República Dominicana, Ramón ganó nueve partidos con sólo una derrota, como miembro de los Tigres del Licey. Su efectividad colectiva fue de 1.43 en 15 salidas como abridor. Lanzó un total de 131 entradas, permitiendo 73 imparables
La vegana Andrea Hernández en judo
SANTO DOMINGO. Andrea Hernández volverá a darle preminencia a la disciplina del judo cuando sea exaltada en el 48 Ceremonial del pabellón de la Fama el próximo 19 de este mes.
Hernández fue escogida para su exaltación por el Pabellón de la Fama del Deporte Dominicano, convirtiéndola en la segunda mujer judoca que logra tal distinción. Emulará a Dulce María Piña, quien tuvo el honor de ser la primera mujer en la exaltación del 2012.
"ES un orgullo y un honor ser tomada en cuenta para algo tan grande como la inmortalidad del deporte. Esta eleccion indica que uno subirá el ultimo escalón de toda una carrera y que esfuerzo valió la pena," comentó Hernández, durante la presentación ayer en el local del Pabellón de la Fama. "Me siento feliz, no voy a esconder que esperaba este momento y ha llegado en un buen momento," agregó la ex judoca.
La ganadora de medalla de oro en los Juegos Centroamericanos y del Caribe será instalada en el templo sagrado del deporte nacional junto a los ex peloteros profesionales Ramón Martínez y Moisés Alou, la otrora astro del baloncesto internacional Teresa Durán, el ex estrella de las selecciones nacional de softbol Josué Polanco, los propulsores José Joaquín Puello, ex presidente del Comité Olímpico Dominicano y de la Odecabe, y Alejandro Tejeda, ex jugador y entrenador de la selección de mayores de baloncesto.
Hernández es considerada entre las mejores atletas de todos los tiempos en su deporte, que colocará a su quinto inmortal en el Pabellón de la Fama. Los otros son Radhamés Lora Salcedo, Juan Chalas, Mamoru Matsunaga y Dulce María Piña.
Su logro en los Santiago 86 la convirtieron en la primera judoka femenina que ganaba una medalla de oro en Juegos Centroamericanos y del Caribe. Se impuso en la división de los 72 kilogramos, derrotando en la final a Idalia Hernández, de Cuba, históricamente una potencia a nivel continental.
Hernández siguió elevando su nivel y ganando medallas casi en cada evento internacional en que representó a República Dominicana. La vegana subiría al podio en unos Juegos Panamericanos cuando peleó la final de los 66 kilogramos en la versión de Indianápolis 87, Estados Unidos. Fue derrotada en una reñida pelea por Sandra Greaves, de Canadá.
Esa plata también la marcó como la primera mujer con una medalla en Juegos Panamericanos. Tras un inesperado y extenso retiro, Andrea regresó a la competición con una presea de oro en 72 kilogramos, durante el III Campeonato Centroamericano y del Caribe celebrado en el país en 1997.
Volvió a sobresalir a nivel a nivel de los Juegos Centroamericanos y del Caribe cuando se adjudicó la medalla de plata en Maracaibo, Venezuela, sede de la cita regional en 1998. Perdió la final ante la cubana Daima Beltrán.
Luego del retiro definitivo se convirtió en una notable dirigente del judo en su natal La Vega. El acto de exaltación de Andrés Hernández, Puello, Tejeda, Alou, Durán, Martínez y Polanco tendrá lugar el domingo 19 a partir de las 11:00 de la mañana, en el auditorio principal del Pabellón de la Fama del Deporte Dominicano, ubicado en el Centro Olímpico Juan Pablo Duarte.
Josué Polanco en softbol
SANTO DOMINGO. Después de ofrecer lo mejor de su talento al deporte dominicano en las disciplinas de softbol a nivel internacional y localmente en el béisbol, Josué Polanco verá cumplido el sueño de cada atleta.
Polanco fue escogido para formar parte de la clase de inmortales a ser exaltados el domingo 19 de este mes, durante el 48 Ceremonial de la Fama, entidad que hizo pública su elección en un encuentro con los periodistas celebrado este jueves en el salón de conferencias del Pabellón de la Fama, con el respaldo de Café Santo Domingo, Critical Power, S.R.L., Ferquido y el Banco Popular Dominicano.
El nativo de Luperón, Puerto Plata, brilló como pocos durante 17 largos como miembro de las selección nacional de softbol, sobresaliendo como uno de los más excelsos bateadores de todo el continente.
"Gracias por tomar mi trabajo, mi trayectoria como atleta en consideracion. Hoy entiendo que valio la pena hacer el trabajo y representar dignamente a nuestro pais. Valio la pena esforzarse y hasta vivir alejado de la familia, que es la gran sacrificada en la vida de un atleta. Agradesco al pais que supo depositar en uno la confianza de representar a la patria," declaro Josue.
El hoy entrenador principal de la selección nacional comenzó a mostrar destellos de peligroso bateador y gran defensor de la tercera base en los torneos de béisbol de la capital, por los años de 1978 con los equipos Brugal y Jaime Pérez. Después jugaría con el Manicero, Superintendencia de Seguros, Honda, Colchón King y sería la clave para que la Fuerza Aérea Dominicana construyera una dinastía en los campeonatos de béisbol y softbol de los Juegos Deportivos militares.
Comenzó a representar al país en el Centroamericano y del Caribe de Softbol celebrado en las ciudades colombianas de Medellín y Cartagena de Indias, donde ayudó al equipo nacional a conquistar la medalla de oro.
Un año después asistió en Mundial de Michigan, Estados Unidos, donde República Dominicana logró la quinta posición respaldada, entre otros, por sobresalientes actuaciones de Josué.
Polanco compitió asimismo en el Panamericano de Softbol del 85 disputado en Medellín y en 1986 fue un miembro prominente del seleccionado dominicano que ganó la medalla de oro en los Juegos Centroamericanos y del Caribe de Santiago 86.
Asistió a los Juegos Panamericanos de Indianápolis 87, Estados Unidos, así como al Campeonato Centroamericano y del Caribe de Durango, México, donde el país logró un quinto lugar y una medalla de oro, respectivamente. En tierras aztecas fue escogido como parte del equipo “Todos Estrellas” y terminó entre los mejores bateadores del certamen.
En el 89 fue el tercera base titular del seleccionado que ocupó la sexta posición en el Panamericano de Paraná, Argentina y en el 91 participó en el Campeonato Centroamericano de Valencia, Venezuela, y los Juegos Panamericanos de La Habana, Cuba.
En Valencia fue líder de cuadrangulares y carreras remolcadas, lo que le mereció el galardón de Jugador Más Valioso, además de ayudar al seleccionado tricolor a ganar la medalla de plata.
Estuvo en el Panamericano de Monterrey, 93 (México) y ese mismo año ayudó a su selección a ganar la medalla de plata en los Juegos Centroamericanos y del Caribe de Ponce, Puerto Rico.
Polanco, quien nació el 9 de abril de 1959, fue también a los Juegos Panamericanos de Mar del Plata 95, en Argentina, y en el 97 fue pieza clave en la plata lograda por el país en el Centroamericano y del Caribe de Cartagena de Indias.
Otros eventos de gran relevancia para Polanco fueron el Panamericano de Softbol de Valencia 98 (Venezuela) con un saldo de una medalla de bronce para República Dominicana, la primera ganada por el país en un evento continental propio de la disciplina.
También, en los Juegos Centroamericanos y del Caribe del mismo año en Maracaibo, Venezuela, donde los dominicanos perdieron la medalla de oro ante los locales en “muerte súbita”. Polanco terminó como líder en jonrones y vueltas remolcadas.
Se retiró como jugador de la selección nacional en los Juegos Panamericanos de Winnipeg 99, en Canadá. Desde entonces ha estado ligado a diferentes selecciones de mayores, principalmente como máximo entrenador, logrando resonantes victorias internacionales.
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