Por el título de este artículo Usted podría pensar en un cambio repentino en la tónica de las publicaciones de este portal, pero no. Realmente enfocaremos nuestra atención en los más exitosos estafadores de bases dominicanos en un terreno de grandes ligas, no en el territorio nacional.
Tomando como parámetro un mínimo de 150 intentos de robo de base, procedimos a preparar dos cuadros. El primero presenta los criollos más eficientes al lanzarse el robo de una almohadilla (en orden de descendente), mientras el segundo, los mas deficientes (en orden ascendente).
Veamos a continuación el resultado:
Mas exitosos robadores dominicanos
Dominicanos menos exitosos en robo de base
El francomacorisano Stanley Javier aparece acreditado como el más competente robador de bases dominicano con un excelente porcentaje de 82.83%, fruto de 246 hurtos en 297 intentos.
Stan Javier Javier supera incluso la proporción del inmortal Rickey Henderson, líder absoluto de todos los tiempos en total de bases estafadas. Henderson exhibe un 80.76% de éxito en su carrera. En ese orden, es importante destacar que el boricua Carlos Beltrán encabeza la lista de los más difíciles de pescar en liga mayor con un insólito 88.11%.
Entre los dominicanos destaca también Wily Taveras (81.59%), el estelar Alex Rodríguez (80.70%) y el torpedero José Reyes (79.57%).
Del otro lado de la moneda, Alfredo Griffin, reconocido en sus años de jugador como un veloz corredor, muestra una pobre proporción de éxito en el robo de base con solo 58.9%. Los numeritos tampoco favorecen a Rafelín Ramírez (59.89%) y Felipe Alou (61.49%).
Jose Reyes 1 Está bien claro que el corredor más rápido no siempre es el más eficaz estafador. Hay verdaderos aviones terrestres que no han trascendido en el renglón de bases robadas, quedando incluso por debajo del promedio de la liga.
Y es que además de la velocidad, es necesario contar con esa ventaja competitiva que solo brinda el estudio minucioso del lanzador y el receptor.
En esencia, saber leer los movimientos del pitcher, estudiar su patrón de pitcheo, así como las fortalezas y debilidades del catcher. Esta parte del juego es fundamental para el buen robador de bases ya que le permite seleccionar el momento preciso para lanzarse al robo de la almohadilla.
Tomando como parámetro un mínimo de 150 intentos de robo de base, procedimos a preparar dos cuadros. El primero presenta los criollos más eficientes al lanzarse el robo de una almohadilla (en orden de descendente), mientras el segundo, los mas deficientes (en orden ascendente).
Veamos a continuación el resultado:
Mas exitosos robadores dominicanos
Dominicanos menos exitosos en robo de base
El francomacorisano Stanley Javier aparece acreditado como el más competente robador de bases dominicano con un excelente porcentaje de 82.83%, fruto de 246 hurtos en 297 intentos.
Stan Javier Javier supera incluso la proporción del inmortal Rickey Henderson, líder absoluto de todos los tiempos en total de bases estafadas. Henderson exhibe un 80.76% de éxito en su carrera. En ese orden, es importante destacar que el boricua Carlos Beltrán encabeza la lista de los más difíciles de pescar en liga mayor con un insólito 88.11%.
Entre los dominicanos destaca también Wily Taveras (81.59%), el estelar Alex Rodríguez (80.70%) y el torpedero José Reyes (79.57%).
Del otro lado de la moneda, Alfredo Griffin, reconocido en sus años de jugador como un veloz corredor, muestra una pobre proporción de éxito en el robo de base con solo 58.9%. Los numeritos tampoco favorecen a Rafelín Ramírez (59.89%) y Felipe Alou (61.49%).
Jose Reyes 1 Está bien claro que el corredor más rápido no siempre es el más eficaz estafador. Hay verdaderos aviones terrestres que no han trascendido en el renglón de bases robadas, quedando incluso por debajo del promedio de la liga.
Y es que además de la velocidad, es necesario contar con esa ventaja competitiva que solo brinda el estudio minucioso del lanzador y el receptor.
En esencia, saber leer los movimientos del pitcher, estudiar su patrón de pitcheo, así como las fortalezas y debilidades del catcher. Esta parte del juego es fundamental para el buen robador de bases ya que le permite seleccionar el momento preciso para lanzarse al robo de la almohadilla.
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