ATLANTA. En otras circunstancias, Al Horford probablemente hubiera
cambiado su uniforme y sus zapatillas por ropa de civil. Pero con la
oportunidad en la vitrina y de poder extender la ventaja en el segundo
partido de la serie, el estelar pívot descartó la lesión que sufrió en
el primer juego y aportó un doble-doble en la victoria 96-91 de los
Atlanta Hawks sobre los Brooklyn Nets la noche del miércoles.
Luego de haberse dislocado el dedo meñique en su mano derecha mientras intentaba agarrar un rebote durante el cuarto periodo del primer partido el domingo, los Hawks estaban reservados respecto a la disponibilidad del ala-pívot dominicano para el segundo juego de la primera ronda de la Conferencia Este.
Horford, quien demoró varios minutos fuera de la cancha del Philips Arena mientras se le vendaba el meñique con el anular, recibió durante los últimos dos días de descanso toda la atención del staff médico de los Hawks, quienes entonces improvisaron un poco, colocándole una venda más gruesa que la que les habían aplicado anteriormente.
El puertoplateño acertó su primer intento de tiro, a 18 pies de la canasta, haciendo el dedo adolorido una ocurrencia tardía.
"Honestamente, una vez que inició el partido, se fue por la borda", indicó Horford, quien anotó 14 puntos, marcando 6 de 15 desde el campo, y tuvo 13 rebotes. "Antes de que comenzó el juego estaba pensando en eso, pero de una vez que inició el partido (no pensé). Obviamente se siente bien cuando haces tu primer tiro, pero cuando comenzó el juego me sentí bien".
A pesar de que la lesión en el meñique lo vio fallar 5 de 8 tiros que lanzó a 13 pies o más de la canasta, Horford hizo un esfuerzo concertado de encontrar a sus compañeros, acumulando siete asistencias.
"Creo que movimos el bien el balón. Encontré a los muchachos y ellos completaron mis jugadas. Comencé siendo más agresivo y en transición empujando el balón un poco más. Creo que eso me ayudó", apuntó.
Aunque Atlanta, que tuvo el segundo mejor registro de la temporada regular en la liga, repitió su plan de juego del primer encuentro, logró un buen ritmo desde el primer parcial, elaborando una ventaja de 12 puntos. Pero tuvo que luchar para poner el partido fuera del alcance de los Nets.
La defensa se relajó, permitiendo el remonte de Brooklyn de un déficit de 11 puntos en el cuarto periodo. Los Nets se colocaron a un punto en un par de ocasiones durante los últimos dos minutos del encuentro, incluyendo un tiro de Deron Williams en los últimos segundos del juego que botó contra el aro y que pudo haber forzado tiempo adicional.
Aunque Brooklyn tuvo mejor promedio, acertando 44.9 por ciento desde el campo (35 de 78) a diferencia del 38.9 por ciento (35 de 90) de los Hawks, y de nuevo ganaron la batalla en la pintura, 38-28, y por los rebotes, 49-41, no fue lo suficiente para igualar la serie que vuelve a la acción este sábado en el Barclays Center.
"Hombre, son los playoffs. Ellos estaban luchando, nosotros luchamos", dijo Horford.
"La cosa buena es que fuimos superiores otra vez. Sólo queremos encontrar maneras de mejorar", continuó. "Hay algunas cosas en las que tenemos que mejorar. Estoy seguro que miraremos el video y lo averiguaremos".
Luego de haberse dislocado el dedo meñique en su mano derecha mientras intentaba agarrar un rebote durante el cuarto periodo del primer partido el domingo, los Hawks estaban reservados respecto a la disponibilidad del ala-pívot dominicano para el segundo juego de la primera ronda de la Conferencia Este.
Horford, quien demoró varios minutos fuera de la cancha del Philips Arena mientras se le vendaba el meñique con el anular, recibió durante los últimos dos días de descanso toda la atención del staff médico de los Hawks, quienes entonces improvisaron un poco, colocándole una venda más gruesa que la que les habían aplicado anteriormente.
El puertoplateño acertó su primer intento de tiro, a 18 pies de la canasta, haciendo el dedo adolorido una ocurrencia tardía.
"Honestamente, una vez que inició el partido, se fue por la borda", indicó Horford, quien anotó 14 puntos, marcando 6 de 15 desde el campo, y tuvo 13 rebotes. "Antes de que comenzó el juego estaba pensando en eso, pero de una vez que inició el partido (no pensé). Obviamente se siente bien cuando haces tu primer tiro, pero cuando comenzó el juego me sentí bien".
A pesar de que la lesión en el meñique lo vio fallar 5 de 8 tiros que lanzó a 13 pies o más de la canasta, Horford hizo un esfuerzo concertado de encontrar a sus compañeros, acumulando siete asistencias.
"Creo que movimos el bien el balón. Encontré a los muchachos y ellos completaron mis jugadas. Comencé siendo más agresivo y en transición empujando el balón un poco más. Creo que eso me ayudó", apuntó.
Aunque Atlanta, que tuvo el segundo mejor registro de la temporada regular en la liga, repitió su plan de juego del primer encuentro, logró un buen ritmo desde el primer parcial, elaborando una ventaja de 12 puntos. Pero tuvo que luchar para poner el partido fuera del alcance de los Nets.
La defensa se relajó, permitiendo el remonte de Brooklyn de un déficit de 11 puntos en el cuarto periodo. Los Nets se colocaron a un punto en un par de ocasiones durante los últimos dos minutos del encuentro, incluyendo un tiro de Deron Williams en los últimos segundos del juego que botó contra el aro y que pudo haber forzado tiempo adicional.
Aunque Brooklyn tuvo mejor promedio, acertando 44.9 por ciento desde el campo (35 de 78) a diferencia del 38.9 por ciento (35 de 90) de los Hawks, y de nuevo ganaron la batalla en la pintura, 38-28, y por los rebotes, 49-41, no fue lo suficiente para igualar la serie que vuelve a la acción este sábado en el Barclays Center.
"Hombre, son los playoffs. Ellos estaban luchando, nosotros luchamos", dijo Horford.
"La cosa buena es que fuimos superiores otra vez. Sólo queremos encontrar maneras de mejorar", continuó. "Hay algunas cosas en las que tenemos que mejorar. Estoy seguro que miraremos el video y lo averiguaremos".
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