Ambos cuartetos compitieron en la segunda serie, que terminaron cuartos y quintos, respectivamente, con cronos de 3:02.35 y 3:02.62, lo que les hubiera dado el pase.
Accedían a la final los tres primeros y los dos mejores tiempos, que recaían en los equipos latinoamericanos, pero según pasaron los minutos se instaló en la zona mixta la ceremonia de la confusión.
El primero en comparecer en la zona fue, con las zapatillas en las manos, Luguelín Santos, subcampeón olímpico de los 400 metros, quien, visiblemente molesto, señalaba que no quería hablar porque les habían descalificado.
En cambio, instantes después, en una pantalla de la zona mixta, aparecía el nombre del equipo con una señal de clasificado. Santos, junto a Gustavo Cuesta y Joel Mejía, apoyados en una valla, miraban la pantalla y no entendían nada. Estaban entre atónitos y muy enfadados.
El cuarteto venezolano se presentó en bloque a continuación, con la satisfacción de haber certificado su clasificación, pero de repente fue informado por Efe de que en los ordenadores interiores del centro de prensa figuraban, como la República Dominicana, descalificados.
Ni unos ni otros entendían nada. No sabían qué podía haber ocurrido y cuando tuvieron acceso a la hoja de resultados tampoco sabían interpretar el artículo que podían haber incumplido.
Félix Sánchez, campeón olímpico de los 400 metros vallas, fue el último en llegar a la zona mixta y, también bastante molesto, aseguró que tenían que "averiguar a ver qué ha pasado" y que en todo caso habían corrido "bien" y habían merecido acceder a la final.
Albert Bravo, el tercer relevista venezolano, aseguró que estaban "muy contentos con la carrera" y que estaban convencidos de que todo el pueblo de su país estarán orgullosos por su actuación.
"Ahora tenemos que apelar porque de verdad no sabemos lo que ha ocurrido. Todos hemos corrido limpiamente", dijo Bravo, en tanto que Arturo Ramírez, quien hizo la primera posta, señaló también que la prueba fue "limpia" y que su salida fue buena y que luego siempre estuvo lejos de las líneas.
Ramírez apuntó que la prueba fue buena, tuvieron una actuación digna de entrar en la final y tan sólo le faltó el remate en el último relevista, de José Meléndez, a quien, en su opinión le "faltó un poquito".
Venezuela fue descalificada por el artículo 170.8 del reglamento, que indica que "los atletas, antes de recibir y/o después que hayan transferido el testigo, deberán permanecer en sus calles respectivas o mantener su posición hasta que la pista quede despejada, para evitar la obstrucción a otros atletas. (...). Si un atleta obstruye intencionadamente a un miembro de otro equipo corriendo fuera de su posición o calle al finalizar su posta, causará la descalificación de su equipo".
La República Dominicana fue eliminada por el artículo 170.19, que señala que "En la carrera de 4x400 metros, a los atletas no les está permitido empezar a correr antes de la zona de transferencia, y deberán comenzar dentro de dicha zona. Si un atleta no cumple con este artículo, su equipo será descalificado".
El único cuarteto latinoamericano que logró la clasificación fue el cubano, que, con un tiempo de 3:00.55, fue tercero de la primera serie tras Trinidad y Tobago (3:00.38) y Gran Bretaña (3:00.38).
Los mejores tiempos los lograron, en la segunda semifinal, Bahamas y Estados Unidos con 2:58.87.
Accedían a la final los tres primeros y los dos mejores tiempos, que recaían en los equipos latinoamericanos, pero según pasaron los minutos se instaló en la zona mixta la ceremonia de la confusión.
El primero en comparecer en la zona fue, con las zapatillas en las manos, Luguelín Santos, subcampeón olímpico de los 400 metros, quien, visiblemente molesto, señalaba que no quería hablar porque les habían descalificado.
En cambio, instantes después, en una pantalla de la zona mixta, aparecía el nombre del equipo con una señal de clasificado. Santos, junto a Gustavo Cuesta y Joel Mejía, apoyados en una valla, miraban la pantalla y no entendían nada. Estaban entre atónitos y muy enfadados.
El cuarteto venezolano se presentó en bloque a continuación, con la satisfacción de haber certificado su clasificación, pero de repente fue informado por Efe de que en los ordenadores interiores del centro de prensa figuraban, como la República Dominicana, descalificados.
Ni unos ni otros entendían nada. No sabían qué podía haber ocurrido y cuando tuvieron acceso a la hoja de resultados tampoco sabían interpretar el artículo que podían haber incumplido.
Félix Sánchez, campeón olímpico de los 400 metros vallas, fue el último en llegar a la zona mixta y, también bastante molesto, aseguró que tenían que "averiguar a ver qué ha pasado" y que en todo caso habían corrido "bien" y habían merecido acceder a la final.
Albert Bravo, el tercer relevista venezolano, aseguró que estaban "muy contentos con la carrera" y que estaban convencidos de que todo el pueblo de su país estarán orgullosos por su actuación.
"Ahora tenemos que apelar porque de verdad no sabemos lo que ha ocurrido. Todos hemos corrido limpiamente", dijo Bravo, en tanto que Arturo Ramírez, quien hizo la primera posta, señaló también que la prueba fue "limpia" y que su salida fue buena y que luego siempre estuvo lejos de las líneas.
Ramírez apuntó que la prueba fue buena, tuvieron una actuación digna de entrar en la final y tan sólo le faltó el remate en el último relevista, de José Meléndez, a quien, en su opinión le "faltó un poquito".
Venezuela fue descalificada por el artículo 170.8 del reglamento, que indica que "los atletas, antes de recibir y/o después que hayan transferido el testigo, deberán permanecer en sus calles respectivas o mantener su posición hasta que la pista quede despejada, para evitar la obstrucción a otros atletas. (...). Si un atleta obstruye intencionadamente a un miembro de otro equipo corriendo fuera de su posición o calle al finalizar su posta, causará la descalificación de su equipo".
La República Dominicana fue eliminada por el artículo 170.19, que señala que "En la carrera de 4x400 metros, a los atletas no les está permitido empezar a correr antes de la zona de transferencia, y deberán comenzar dentro de dicha zona. Si un atleta no cumple con este artículo, su equipo será descalificado".
El único cuarteto latinoamericano que logró la clasificación fue el cubano, que, con un tiempo de 3:00.55, fue tercero de la primera serie tras Trinidad y Tobago (3:00.38) y Gran Bretaña (3:00.38).
Los mejores tiempos los lograron, en la segunda semifinal, Bahamas y Estados Unidos con 2:58.87.