DENVER - Como cualquier cátcher sensato, Wilín Rosario ve al boricua
Yadier Molina como un modelo a seguir-pero con un matiz diferente.
Molina ha pasado de ser un bateador no destacado-tuvo promedio de
.216 en el 2006-a ser un peligro con el madero. Su promedio de .319 en
el 2013 por poco le valió el premio al Jugador Más Valioso de la
Nacional. El dominicano Rosario, el receptor principal de los Rockies
durante los últimos dos años, cree que puede hacer con su defensa lo que
hizo Molina con su ofensiva en los Cardenales.
"Si él puede batear luego de unos años en Grandes Ligas, ¿por qué no
puedo yo ser buen cátcher?" expresó el quisqueyano al final de la
temporada del 2013.
En días recientes parecía que los Rockies podían buscar un receptor
nuevo para mover a Rosario a la primera base o los jardines, pero ahora
todo luce indicar que el oriundo de Bonao la oportunidad de progresar
detrás del plato. Colorado buscó negociar con el panameño
Carlos Ruiz en la agencia libre, pero al final el istmeño renovó con los Filis por tres años y US$26 millones.
No firmar a Ruiz significa que los Rockies seguirán con el plan de
mejorar la defensa de Rosario, uno de los cátchers de más bateo en
Grandes Ligas.
Rosario, quien cumplirá los 25 años el 23 de febrero, ha encabezado a
los receptores de la Liga Nacional en jonrones en cada una de las
últimas dos campañas-27 en el 2012 y 21 en el 2013-y ha conectado más
vuelacercas desde su debut en las mayores el 6 de septiembre del 2011
(51) que cualquier otro cátcher en la Gran Carpa.
El joven puso la marca de todos los tiempos de la franquicia para
empujadas en una temporada de un cátcher con 71 en el 2012 y rompió ese
mismo récord con 79 este año. En el 2013 terminó cuatro entre los
receptores de la Nacional en total de bases alcanzadas con 218. Dicha
temporada fue limitada a 121 juegos, debido a una lesión en la
pantorrilla derecha en septiembre.
Sin embargo, los números defensivos-basados en estadísticas y datos subjetivos-no hablan tan bien de Rosario.
El dominicano logró un progreso en cuanto a
passed balls, ya
que de tener la mayor cantidad de Grandes Ligas con 21 en el 2012,
redujo dicha cifra a nueve este año. Pero TheScore.com, que toma en
cuenta bases robadas, corredores atrapados en intento de robo y errores,
colocó a Rosario en el lugar número 97 entre los 101 cátchers
analizados. El StatCorner Catcher Report, que examina bolas y strikes
con el fin de calificar la habilidad de un receptor de "cuadrar" los
pitcheos para que sean strikes, Rosario fue el segundo peor entre 121
cátchers. Sin embargo, Baseball Info Solutions tuvo a Rosario en el
noveno lugar entre los catchers de Grandes Ligas en carreras defensivas
salvadas.
Los inconvenientes a la defensa no son sorpresa. Rosario fue operado
de la rodilla derecha en agosto del 2010, lo que acortó su tiempo de
desarrollo. Colorado lo subió en el 2011 sabiendo que aún le hacía falta
trabajar ciertas cosas. El plan era que fuera el sustituto del
venezolano Ramón Hernández en el 2012, pero múltiples lesiones del
veterano obligó a Rosario a manejar la mayor carga detrás del plato.
El venezolano
Yorvit Torrealba, una especie de mentor para Rosario en el 2013, ayudó al dominicano con un programa especial de variadas prácticas.
"Cuando naces, tomas pasitos-no te levantas para caminar de una vez",
dijo Torrealba. "Creo que fue 100% mejor de lo que había escuchado. Y
el próximo año estoy seguro de que será aun mejor".
Son varias cosas que tendrá que mejorar para el 2014.
Al principio de este año, Rosario se veía medio robótico por una
sobre-carga de datos de scouts. Torrealba lo apoyó durante los partidos
al ayudarlo a leer la efectividad de su pitcher y los swings de los
bateadores. Otra debilidad es controlar el rebote de la bola cuando la
bloquea, para evitar que avancen los corredores.
Ahora mismo Rosario está jugando con las Aguilas Cibaeñas en la Liga
Dominicana y allí comparte con los ex cátchers de Grandes Ligas Tony
Peña (actualmente coach de la banca de los Yankees) y Alberto Castillo.
"Seguiré trabajando en mi juego-bloquear, recibir, pedir el juego,
todas esas cosas que puedo hacer mejor detrás del plato", dijo Rosario,
quien tiene previsto regresar a Denver para el nacimiento de su segundo
hijo con su esposa Génesis. También entrenará con su hermano Jairo
Rosario, un prospecto presicamente como receptor en el sistema de los
Rockies.
"Wilín es nuestro cátcher", dijo Bill Geivett, director de
operaciones de Grandes Ligas de los Rockies. "Necesitamos encontrar la
manera de tener su bate en el lineup. Pero a su edad ahora, no nos
preocupamos por su condición de receptor".
Rosario no quiere cambiar de posición y cree que puede recuperar el tiempo perdido en su desarrollo como cátcher.
"Cuando estás quechando, te preocupas por muchas cosas-pedir un
juego, quién está bateando, quién está en el círculo de espera, que si
van a correr y si es al final del juego, quién va a batear como
emergente. Es todo".