SALVADOR (EFE) -- Diego Forlán mostró el jueves parte de la clase que
lo llevó a ser elegido el mejor jugador del Mundial de Sudáfrica 2010,
marcó el gol de la victoria por 1-2 de Uruguay sobre Nigeria y revivió
las esperanzas Celestes de clasificarse a las semifinales de la Copa
Confederaciones.
Además, cumplió su centésimo partido con la selección y con 34 goles pasó a ser el máximo goleador histórico de Uruguay.
Cuando tuvo el balón en los pies, marcó el ritmo del juego y su
selección pudo haber ganado con mayor claridad si sus compañeros, en
especial el máximo 'rompe redes' de la última Liga italiana, Edinson
Cavani, hubiese estado con su puntería habitual.
El
seleccionador uruguayo, Oscar Washington Tabárez, dijo antes del partido
que este era el encuentro "clave" para el futuro en el torneo y planteó
un esquema bastante más ofensivo con relación al debut, cuando los
Celestes perdieron por 1-2 frente a España.
El técnico y dio cabida entre los titulares a su tridente goleador de Suárez, Cavani y Forlán.
Pero el mayor cambio, por lo menos en el inicio del partido, fue la
postura de los Celestes jugando prácticamente en campo rival y
acorralando a los nigerianos en los primeros minutos.
El equipo africano se vio sorprendido por esa primera presión uruguaya que fue efectiva al comienzo.
Después, los nigerianos se hicieron con el balón y hilvanaron sus
ataques por las bandas, aprovechando además la velocidad de Musa y el
buen pie para las habilitaciones de Mikel.
Dispuso Nigeria de varios cobros de faltas en la cercanía de la valla uruguaya, pero unos tras otros fueron desperdiciados.
Cuando el juego era equilibrado llegó la apertura del marcador, en el
minuto 19, en un despiste general de la defensa nigeriana.
Forlán recibió un rebote tras un saque de esquina, envió el balón desde
la izquierda hacia el área y, de forma paralela a la línea de banda,
Cavani intentó un taco sin éxito pero Lugano logró tocar el balón al
fondo de la portería.
Seis minutos después, una larga
galopada de Suárez por el mismo sector terminó con otro balón rasante al
área, pero la defensa nigeriana restó 'in extremis' cuando Forlán
acechaba.
Se relajó Uruguay tras el gol, retrasó sus
líneas, no estuvo claro para sacar el contragolpe y los nigerianos
pasaron a dominar el en centro del campo.
Aunque no llegaban con demasiado peligro a la valla Celeste, eran insistentes en buscar los caminos. Y tuvieron su premio.
Ideye capturó un balón cerca del área uruguaya en el minuto 37, dio
una precisa habilitación a Mikel, el centrocampista del Chelsea eludió a
Lugano y remató con categoría al ángulo derecho de la portería.
Musulera nada pudo hacer.
Celebración en las tribunas que se volcaron claramente a favor de Nigeria.
Enseguida un despiste en la salida del balón del propio Lugano casi le cuesta el segundo gol a su equipo.
En el reinicio llegó la mejor jugada colectiva del partido.
Suárez recogió un balón en el centro del campo, salió disparado y dio
un pase justo a Cavani que a su vez dejó en carrera a Forlán y el
goleador sacó un remate potente y alto de pierna izquierda poniendo en
balón en el ángulo. Un golazo.
La nueva conquista le dio tranquilidad a los uruguayos, que bajaron
el ritmo del partido, se plantaron en su área y pudieron llegar a
liquidar el encuentro, pero esta vez Cavani no tuvo su mejor noche y
falló dos claras opciones de gol.
La selección nigeriana,
que goleó por 1-6 a los inexpertos tahitianos en su primera
presentación, se enfrentará el próximo día 23 con España y los uruguayos
jugarán frente a Tahití.