Guardiola: "Jugando como en los últimos partidos no llegamos a ninguna final"

BERLÍN -- El entrenador del FC Bayern, el español Pep Guardiola, advirtió que si su equipo sigue jugando como lo ha hecho en los últimos tres compromisos alcanzará ni la final de la Copa de Alemania, para lo que tiene que ganar mañana al Kaiserslautern, ni tampoco la de la Liga de Campeones.

Bayern busca la final de la Copa de Alemania

"Si jugamos como en los últimos tres partidos no vamos a llegar a ninguna final", dijo Guardiola en la conferencia de prensa previa a la semifinal copera contra el Kaiserslautern.
El Bayern, tras sentenciar anticipadamente la Bundesliga, ha tenido un claro bajón de rendimiento que se agudizó el sábado cuando el equipo de Guardiola cayó goleado en casa ante el Borussia Dortmund (0-3).
Unas estadísticas publicadas por la revista "Kicker" en su edición digital documentan el bajón.
Mientras antes de la conquista de la Bundesliga el porcentaje de pases que eran interceptados por un contrario era del 13 por ciento, esta cuota ha subido al 17 por ciento.
Los kilómetros recorridos por partido también muestran una tendencia a la baja. Mientras el sábado pasado los jugadores del Bayern ante el Dortmund corrieron 110 kilómetros, antes de asegurarse la ensaladera tenían un promedio de 115,9 kilómetros por partido.
La posesión de pelota, por su parte, ha bajado del 67 al 64 por ciento.
Guardiola, tras conquistar la Bundesliga, dijo que su obligación es volver a lograr el triple conquistado en la temporada pasada por su antecesor Jupp Heynckes.
Para ello, Guardiola radicalizó la rotación, lo que le llevó críticas después de encajar su primera derrota por 1-0 ante el Augsburgo a las que el entrenador catalán respondió diciendo que lamentaba mucho pero que la Bundesliga ya había terminado y la había ganado a su equipo.
Tras la goleada encajada ante el Dortmund, en un partido en el que el Bayern salió al campo con su formación titular, Guardiola admitió que probablemente había cometido un error al decir que los records en la Bundesliga no eran importantes y que el foco estaba ahora en las otras competiciones, lo que contribuyó a que el equipo bajase el ritmo.