Steve Kerr: Fue difícil rechazar a Jackson

Steve Kerr maneja bien al conjunto de Golden State gracia en gran parte a la labor de Stephen Curry

NUEVA YORK - Steve Kerr fue la opción ideal que Phil Jackson consideró cuando inició una búsqueda por el próximo coach de los New York Knicks de cara a esta temporada. Tras reunirse con el presidente de los Knicks, el entonces analista de la cadena televisiva TNT le había dado su palabra, asegurándole a la escuadra neoyorquina que ya tenían un nuevo estratega en su lugar.
Lo único que faltaba era la terminación de un acuerdo cuando de repente emergió la noticia que los Golden State Warriors habían relevado a Mark Jackson de su cargo con la franquicia californiana.
Los dueños de los Warriors abalanzaron, reuniéndose con Kerr por tres horas antes un partido de los playoffs en Okalahoma City, básicamente ofreciéndole las llaves de la organización.
Kerr se encontró en una posición pantanosa: rechazar a Jackson o convertirse en el próximo dirigente de Golden State por los próximos cinco años.
El líder en porcentaje de triples (.454) de todo tiempo de la NBA recaló al Madison Square Garden por primera vez esta temporada y sin lugar a dudas se encontraba en un mejor estado, dirigiendo a una escuadra de los Warriors que ha producido el segundo mejor balance de la liga y que se encuentra sentado en el tope de la Conferencia Oeste, mientras que Jackson y los Knickerbockers navegaban por los escombros de la liga.
Rechazar al coach con quien ganó tres títulos fue duro de lograr, pero quién lo puede culpar  al tener de frente la oportunidad de tomar la guía de un conjunto preparado para competir por un campeonato y estar cerca de su vivienda en el sur de California.
Para ese entonces, su única hija se encontraba jugando en el equipo de voleibol de la Universidad de California, su hijo mayor estaba estudiando en una universidad en San Diego, donde Kerr tiene su casa, y su hijo menor estaba en su tercer año de la escuela primaria.
"Fue difícil porque soy muy, muy cerca a (Phil) y me siento como que estoy en deuda con él porque fue una gran parte de lo que ocurrió en mi carrera", indicó Kerr la noche del sábado en las afueras del camerino visitante del Garden.
"Todo lo que pasó en Chicago me llevó a San Antonio, que entonces me condujo a lo que se dio a lugar en Phoenix y aquí (Golden State)", agregó el dirigente de los Warriors, que iniciaron la jornada de sábado con un récord de 39-9.
"Todo es debido a la experiencia de Chicago y es todo gracias a Phil. Por él fue que llegué a Chicago en el primer lugar", continuó. "Así que desde ese punto de vista, era difícil.
Pero desde el otro lado de las cosas - la familia - era mucho más fácil estar cerca de casa y, literalmente, a dos millas de mi hija que va a Berkley y tengo un equipo que tiene mucho talento y grandes muchachos. Fue una gran decisión".
Kerr afirmó que ha mantenido su comunicación con Jackson a través de intercambios de correos electrónicos y que anticipaba verlo en persona antes de marcharse de la Gran Manzana hacia Filadelfia donde Golden State continuará el lunes esta gira de cuatro partidos.
Para el entrenador novato, que funcionó como gerente general de los Phoenix Suns de 2007 a 2010, no hay marcha atrás tras aceptar nuevo reto de su vida después de haber experimentado sus mejores días como un NBA bajo la dirección del Zen Master.