Poco después de que concluyó la temporada regular, Segura se casó con una venezolana llamada Kellen y la pareja le dio la bienvenida a un hijo, Juan Diego, quien nació en Milwaukee en octubre. La familia de Segura lo está acompañando en Phoenix para los entrenamientos. Su padre, Carlos, también está visitando los Estados Unidos por primera vez y está ansioso por ver a su hijo jugar en Grandes Ligas.
"Estoy tratando de olvidar lo que sucedió el año pasado", dijo Segura. "La mente tiene mucho que ver con este juego. Sin duda alguna. Aunque tengas todo el talento del mundo, si tu mente no está donde debe de estar, no vas a tener éxito".
El año pasado, en espacio de unos meses, Segura rechazó una extensión de contrato con Milwaukee que según los informes le hubiese garantizado US$38 millones, se perdió parte de los entrenamientos con dolores en el hombro derecho, tuvo problemas con el madero y fue bajado en el orden ofensivo de los Cerveceros. Además, requirió de puntos tras ser golpeado por un swing de Ryan Braun. Y en julio, Segura se enteró de que su hijo de unos meses había fallecido en la República Dominicana.
"Nunca me voy a olvidar de mi hijo, pero Dios me dio otro", expresó Segura.
En el 2014, Segura bateó .246 con porcentaje de embasarse de .289 y apenas 25 extrabases en 513 turnos al bate. La temporada anterior, en la cual fue convocado al Juego de Estrellas, había bateado .294 con porcentaje de embasarse de .329 y 42 extrabases.
Segura regresó a la República Dominicana este invierno y siguió jugando béisbol. Aprovechó sus turnos en la pelota invernal para perfeccionar un ajuste mecánico a la hora de batear. En lugar de poner los pies planos sobre el suelo, ahora alza un poco la pierna de adelante.
Dicho ajuste se lo sugirieron el manager de los Cerveceros, Ron Roenicke, y el ex coach de bateo del club, Johnny Narron, el año pasado. Segura también se puso a ver videos de algunos de los mejores bateadores de Grandes Ligas - entre ellos Mike Trout y el venezolano Miguel Cabrera - y tuvo su mejor mes en septiembre al registrar promedio de .319 y porcentaje de embasarse de .364.
"Me está dando resultados", dijo Segura. "Lo voy a seguir haciendo".
Segura, quien afirma que no le pesa haber rechazado la oferta de contrato de los Cerveceros el año pasado, confía en que "llegará el momento" de que se le pague si logra recuperar la forma esta temporada.
"Ahora voy a jugar", dijo. "Me voy a olvidar de todo lo que sucedió el año pasado. Este es un nuevo año para mí".
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