Real Madrid y Atlético de Madrid disputarán hoy sábado un derbi que definirá el ganador de la Liga de Campeones, sin que ninguno de los dos equipos aclare la situación de su enfermería.
Diego
Simeone dijo ayer viernes que decidirá la alineación de los lesionados
Diego Costa y Arda Turán después del último entrenamiento, realizado en
el estadio de la Luz de Lisboa. Mientras que Carlo Ancelotti dio por
recuperado a Cristiano Ronaldo, pero admitió que Pepe y Karim Benzema no
han entrenado en toda la semana y son seria duda.
“Vamos a evaluar a Diego (Costa) y Arda (Turan). Ayer (jueves) entrenaron mejor, charlaremos con ellos y decidiremos en función de cómo se sientan y cómo los veamos”, dijo el técnico argentino. “Cristiano no tiene problema, con Pepe y Karim (Benzema) evaluaremos”, señaló Ancelotti.
Costa, que viajó a Belgrado el miércoles a tratarse el muslo derecho con placenta de yegua, entrenó el viernes aparentemente con normalidad por espacio de una hora. Realizó carrera y participó en todos los rondos con sus compañeros. Eso sí, no se le vio disparar a puerta. Un ejercicio vital para medir la recuperación de músculo desgarrado.
Pero Simeone aseguró que, si finalmente son bajas, no experimentará con el once. Y que el Atlético será el equipo reconocible campeón de liga y brillante finalista de la Copa de Europa.
“Más allá de la importancia de Costa y Turan en el juego del equipo, son solo nombres. Ellos ya saben que si no están, hay dos chicos que ya saben que van a jugar”, señaló.
“Estamos muy confiados porque tenemos una identidad muy fuerte, nuestro equipo ha demostrado que sabe lo que tiene que hacer. Nada cambiara mañana (sábado)”, añadió el mediocampista portugués Tiago. “Seremos el Atlético de siempre”.
En cuanto al Madrid, Benzema y Cristiano también entrenaron sin novedad. No así Pepe, que trabajó al margen en algunos de ejercicios específicos. El central portugués se desagarró el gemelo izquierdo hace dos semanas y su plaza podría ser ocupada por el francés Raphael Varane.
El entrenamiento del Madrid fue observado por Raúl González, mítico ex delantero del club merengue.
Miles de aficionados españoles empezaban a calentar el viernes el ambiente de la final, a la que asistirán el rey Juan Carlos y el presidente Mariano Rajoy.
Simeone insistió en que prevé un partido muy complicado, ante uno de los mejores equipos del mundo. Y aseguró que la clave para los jugadores es “abstraerse” de todo lo que rodea a la final.
“Vamos a evaluar a Diego (Costa) y Arda (Turan). Ayer (jueves) entrenaron mejor, charlaremos con ellos y decidiremos en función de cómo se sientan y cómo los veamos”, dijo el técnico argentino. “Cristiano no tiene problema, con Pepe y Karim (Benzema) evaluaremos”, señaló Ancelotti.
Costa, que viajó a Belgrado el miércoles a tratarse el muslo derecho con placenta de yegua, entrenó el viernes aparentemente con normalidad por espacio de una hora. Realizó carrera y participó en todos los rondos con sus compañeros. Eso sí, no se le vio disparar a puerta. Un ejercicio vital para medir la recuperación de músculo desgarrado.
Pero Simeone aseguró que, si finalmente son bajas, no experimentará con el once. Y que el Atlético será el equipo reconocible campeón de liga y brillante finalista de la Copa de Europa.
“Más allá de la importancia de Costa y Turan en el juego del equipo, son solo nombres. Ellos ya saben que si no están, hay dos chicos que ya saben que van a jugar”, señaló.
“Estamos muy confiados porque tenemos una identidad muy fuerte, nuestro equipo ha demostrado que sabe lo que tiene que hacer. Nada cambiara mañana (sábado)”, añadió el mediocampista portugués Tiago. “Seremos el Atlético de siempre”.
En cuanto al Madrid, Benzema y Cristiano también entrenaron sin novedad. No así Pepe, que trabajó al margen en algunos de ejercicios específicos. El central portugués se desagarró el gemelo izquierdo hace dos semanas y su plaza podría ser ocupada por el francés Raphael Varane.
El entrenamiento del Madrid fue observado por Raúl González, mítico ex delantero del club merengue.
Miles de aficionados españoles empezaban a calentar el viernes el ambiente de la final, a la que asistirán el rey Juan Carlos y el presidente Mariano Rajoy.
Simeone insistió en que prevé un partido muy complicado, ante uno de los mejores equipos del mundo. Y aseguró que la clave para los jugadores es “abstraerse” de todo lo que rodea a la final.
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