Rafael Nadal, campeón en Buenos Aires

BUENOS AIRES -- Rafael Nadal (4°) volvió a festejar en grande. Sumó su primer título en casi nueve meses, al vencer a Juan Mónaco (60°) por 6-4 y 6-1 en la final del ATP 250 de Buenos Aires.
Todo fue más lento de la cuenta porque se demoró desde el arranque: a tres horas del horario pautado para el inicio, apenas habían podido disputar dos games, culpa de las lluvias intermitentes.
Luego de un comienzo parejo, el primer quiebre llegó del lado de Nadal, capitalizando un revés que Mónaco dejó en la red para el 4-3 y saque, a favor del manacorí, situación que no se alteró hasta el 6-4 parcial, más allá del buen nivel del argentino.

Nadal, nuevo dueño de Buenos Aires

El comienzo del segundo también tuvo un prólogo trabado: un game bien largo, que terminó cayendo del lado de Nadal para ya servir 1-0 y saque y encaminarse a una nueva corona en el circuito mundial, tras una hora y 28 minutos de un choque en el que aprovechó 4 de 9 chances de quiebre y no debió soportar ni una situación de ese calibre con su servicio. El español, que sumó su título Nº 46 en esta superficie, regresaba a una definición después de nueve meses, tras su coronación -la novena- en Roland Garros. Después de su presencia en París, muchos problemas: lesión en una muñeca y una apendicitis. Ahora, recuperando un poco la confianza, va por más.
Mientras los datos oficiales indicaban que Guillermo Vilas suma justamente 46 títulos sobre canchas lentas, versiones ahora indican que fueron 49, por lo que la polémica se agiganta.
Nadal, en su reaparición en Buenos Aires después de una década, sumó su sexto título en la gira latinoamericana, tras sus festejos en Acapulco (2005 y 2013), San Pablo (2005 y 2013) y Río de Janeiro (2014). Llega a la definición con victorias ante tenistas locales: Facundo Argüello, Federico Delbonis y Carlos Berlocq.
Ahora, en la definición, fue más que el argentino Juan Mónaco, gran amigo y compañero de dobles: "Es una final muy complicada. Ha jugado grandes partidos con Almagro y Cuevas. Sólido con pocos errores, agresivo. Pico está a un nivel muy alto y es peligroso, aún más en tierra. No son las mismas condiciones que en Sevilla (final de Copa Davis), la pista estaba pesadísima. A pico le costaba que la bola le corriera. Los puntos eran muy largos y a él le costaba más definir", decía en la previa, aunque poco de esto pudo verse.
En los antecedentes, el N°4 del mundo ahora se impone por 6-1 con una única derrota sobre canchas duras. Todas sus victorias fueron con marcador abultado, incluyendo una en Roland Garros y otra por Copa Davis al mejor de 5 sets. En la suma de esos cinco partidos el español apenas había dejado 13 games en el camino. Es decir, un promedio de un poco más de un juego por set.
Cabe destacar que el ATP de Buenos Aires es ganado por tenistas españoles desde 2009, con una seguidilla de coronas de Tommy Robredo, Juan Carlos Ferrero, Almagro,  David Ferrer y, en esta edición, Rafael Nadal. A su vez, el último argentino en ganar el evento fue David Nalbandian, en 2008. No obstante, el título se reparte entre españoles y argentinos desde 2002, año en el que se consagró el chileno Nicolás Massú.