Si a usted no le gusta la idea de observar a
Manny Ramírez jugando para los Yankees de Nueva York, usted
absolutamente no tiene ningún sentido de la aventura.
Seguro el gerente general de los Yankees, Brian Cashman ha estado apartado de firmar jugadores con la clase de interioridades que por años han acompañado a Manny. Hace un buen tiempo, en el 2008 comenzaron los rumors de que Ramírez podría vestir en algún momento el uniforme de los Yankees.
Para esa época el dominicano era un jugador ya poco feliz en Boston, equipo que no le había ofrecido un nuevo contrato, entonces comenzó a salirse de los partidos con lesiones que los doctores no podían detectar. El vio cumplido sus deseos de ser negociado a los Dodgers y entonces firmó una extensión contractual de 45 millones. Para tomar una oportunidad, Ramírez a la edad de 41 años está con los ojos bien abiertos en busca de una oportunidad. El dominicano ha sido uno de los grandes jugadores de ofensivas en los pasados 50 años y si le queda alguna estamina en el tanque podría ayudar a los Yankees, equipo que requiere a como de lugar ayuda en la ofensiva.
En en otro lado, Manny es diferente. En algunos aspectos es alegre y juega de manera divertida. Manny podría ser un pelotero que atraería a los Yankees. O quizás a los Reales de Kansas City, conjunto que también requiere incrementar su ofensiva. Los Reales cuentan con uno de los mejores cuerpo monticulares, pero esto probablemente no es necesario para abrazar los playoffs.
Seguro el gerente general de los Yankees, Brian Cashman ha estado apartado de firmar jugadores con la clase de interioridades que por años han acompañado a Manny. Hace un buen tiempo, en el 2008 comenzaron los rumors de que Ramírez podría vestir en algún momento el uniforme de los Yankees.
Para esa época el dominicano era un jugador ya poco feliz en Boston, equipo que no le había ofrecido un nuevo contrato, entonces comenzó a salirse de los partidos con lesiones que los doctores no podían detectar. El vio cumplido sus deseos de ser negociado a los Dodgers y entonces firmó una extensión contractual de 45 millones. Para tomar una oportunidad, Ramírez a la edad de 41 años está con los ojos bien abiertos en busca de una oportunidad. El dominicano ha sido uno de los grandes jugadores de ofensivas en los pasados 50 años y si le queda alguna estamina en el tanque podría ayudar a los Yankees, equipo que requiere a como de lugar ayuda en la ofensiva.
En en otro lado, Manny es diferente. En algunos aspectos es alegre y juega de manera divertida. Manny podría ser un pelotero que atraería a los Yankees. O quizás a los Reales de Kansas City, conjunto que también requiere incrementar su ofensiva. Los Reales cuentan con uno de los mejores cuerpo monticulares, pero esto probablemente no es necesario para abrazar los playoffs.
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