Leyland, de 68 años, cuyos Tigres vieron terminada su temporada el sábado cuando perdieron el sexto juego de la Serie de Campeonato de la Liga Americana ante los Medias Rojas de Boston, dijo que permanecería con el equipo en alguna capacidad.
"No me estoy retirando hoy, es solo que no quiero estar más en el dugout", dijo un emocionado Leyland.
Leyland dirigía los Tigres bajo una extensión de contrato por una temporada que firmó hace un año, después de que Detroit fue barrido por los Gigantes de San Francisco en la Serie Mundial.
Los jugadores de Detroit supieron de la partida de Leyland después del partido del sábado por la noche en Boston. "Uno está cabizbajo, termina la temporada con una derrota y entonces Jim nos lanzó esa bomba a nosotros", dijo el jardinero Torii Hunter. "Tenía esa sensación de que podía haver sido su última temporada. Todo el año, estuvo bien emocional y lo sentía".
Leyland dijo que estaba feliz por el trabajo que hizo en Detroit y agradecía a la organización por crear una atmósfera ganadora. "Esto duele mucho, porque pensaba que nos escapábamos Lo hicimos colectivamente no hay un culpable", dijo Leyland tras la derrota en la serie de campeonato. "Es algo que va a seguir conmigo".
Cuando Leyland llegó al entrenamiento primaveral de los Tigres este año, marcó la temporada número 50 desde que llegó por primera vez como un prospecto de 18 años. Su carrera como jugador no duró mucho, pero sus logros como managers por más de dos décadas fueron impresionantes.
Tuvo marca de 1,769-1,728 durante su carrera que incluyó paradas con los Tigres Piratas de Pittsburgh, Marlins de Florida y Rockies de Colorado. Ganó la Serie Mundial con los Marlins en 1997.
También fue parte de varios de los juegos más memorables: La derrota de Pittsburgh en el séptimo juego de la Serie de Campeonato de la Liga Nacional en 1992, la victoria de Florida sobre Cleveland en el séptimo juego de la Serie Mundial de 1997 y la derrota de Detroit ante Minnesota en el juego de playoffs por el banderín de la División Central de la Liga Americana en 2009.
Cuando se hizo cargo de los Tigres, el equipo venía de doce temporadas perdedoras. Bajo su mandato, finalizaron bajo .500 en una sola ocasión.
0 comentarios:
Publicar un comentario