Los Leones del Escogido, que en los últimos
cuatro años están haciendo ver sus épicas remontadas como algo
rutinario, asisten esta noche en calidad de campeones a la revancha
contra las Águilas Cibaeñas en la serie final deseada.
Con su instinto asesino, los Leones labraron su camino hacia la clasificación al Round eliminando el 21 de diciembre al Licey y al día siguiente a los Gigantes del Cibao, ambos en partidos de vida o muerte.
El 13 de enero le infligieron la derrota número diez a las Estrellas Orientales que oficialmente decretó su eliminación de al ronda semifinal y anoche hicieron lo propio con los Toros del Este.
La final está pactada a un 9-5 y pinta cerrada y larga, como la del 2012 que se fue al máximo y el remozado equipo escarlata terminó conquistando su segundo título de campeón en tres años.
El relevo, su principal dolor de cabeza en la ronda regular, se ha fortalecido de forma tal con la integración de Fernando Rodney, Johnny Núñez y Octavio Dotel, principalmente, que ahora es su principal fortaleza.
Un caso inverso le ocurre con la rotación abridora al conjunto que desde el nueve de diciembre tiene bajos sus riendas Audo Vicente. El pitcher de esta noche, Edward Valdez, un “come Águilas” que viene de ganar cuatro juegos en la semifinal, incluyendo dos a ellas, y el zurdo Kris Johnson son los únicos dos confiable de la misma.
Nelson Figueroa (1-3 y un promedio de carreras limpias permitidas de 4.91 en esa etapa) es una interrogante, al igual que los zurdos Randy Keisler (0-1, 9.00) y José de Paula (0-1, 4.91). Por su pobre desempeño, éste último fue sacado de la rotación.
Cabrera, necesario
Ahora más que nunca, los Leones necesitan que Daniel Cabrera, quien no lanza desde el 21 de diciembre debido a que en el pasado año acumuló unas 200 entradas y necesita descanso, suba aunque sea una vez al box.
La ofensiva, que por momentos se torna infuncional, fue la mejor en el Round Robin con average de .280 y los 15 jonrones, seis de los cuales salieron del bate de Mauro Gómez, y tres del de Starling Marte, también fueron la mayor cantidad de la serie.
Jordany Valdespín (.429), quien compartió el liderato de bateo con Leury García, de las Águilas, y el mexicano Jorge Cantú, seleccionado en el Sorteo de Importados realizado ayer por la Liga de Béisbol, completan la masa de la alineación.
Con su instinto asesino, los Leones labraron su camino hacia la clasificación al Round eliminando el 21 de diciembre al Licey y al día siguiente a los Gigantes del Cibao, ambos en partidos de vida o muerte.
El 13 de enero le infligieron la derrota número diez a las Estrellas Orientales que oficialmente decretó su eliminación de al ronda semifinal y anoche hicieron lo propio con los Toros del Este.
La final está pactada a un 9-5 y pinta cerrada y larga, como la del 2012 que se fue al máximo y el remozado equipo escarlata terminó conquistando su segundo título de campeón en tres años.
El relevo, su principal dolor de cabeza en la ronda regular, se ha fortalecido de forma tal con la integración de Fernando Rodney, Johnny Núñez y Octavio Dotel, principalmente, que ahora es su principal fortaleza.
Un caso inverso le ocurre con la rotación abridora al conjunto que desde el nueve de diciembre tiene bajos sus riendas Audo Vicente. El pitcher de esta noche, Edward Valdez, un “come Águilas” que viene de ganar cuatro juegos en la semifinal, incluyendo dos a ellas, y el zurdo Kris Johnson son los únicos dos confiable de la misma.
Nelson Figueroa (1-3 y un promedio de carreras limpias permitidas de 4.91 en esa etapa) es una interrogante, al igual que los zurdos Randy Keisler (0-1, 9.00) y José de Paula (0-1, 4.91). Por su pobre desempeño, éste último fue sacado de la rotación.
Cabrera, necesario
Ahora más que nunca, los Leones necesitan que Daniel Cabrera, quien no lanza desde el 21 de diciembre debido a que en el pasado año acumuló unas 200 entradas y necesita descanso, suba aunque sea una vez al box.
La ofensiva, que por momentos se torna infuncional, fue la mejor en el Round Robin con average de .280 y los 15 jonrones, seis de los cuales salieron del bate de Mauro Gómez, y tres del de Starling Marte, también fueron la mayor cantidad de la serie.
Jordany Valdespín (.429), quien compartió el liderato de bateo con Leury García, de las Águilas, y el mexicano Jorge Cantú, seleccionado en el Sorteo de Importados realizado ayer por la Liga de Béisbol, completan la masa de la alineación.
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