Si de segunda base se trata, el pleito en las Grandes Ligas está polarizado precisamente entre dos miembros de los dos rivales más encarnizados de todas las Grandes Ligas.
De un lado aparece el intermedista dominicano Robinson Canó, de los Yanquis de Nueva York, mientras que del otro sale a relucir la figura de Dustin Pedroia, de los Medias Rojas de Boston.
Ambos han demostrado en el corto tiempo que tienen en Grandes Ligas que son dos estrellas de mucho peso en el firmamento del béisbol y con futuros muy promisorios.
Canó enseñó sus herramientas temprano, estableciéndose como regular en su primera oportunidad en las mayores, en el 2005, cuando bateó para .297, con 14 cuadrangulares y 62 remolcadas en un año en el que terminó segundo en las votaciones para el premio al Novato del Año de la Liga Americana.
De ahí en adelante, Canó ha ido demostrando la capacidad con el madero que lo ha convertido en un multimillonario y en una de las piezas más importantes de los Mulos del Bronx.
En su segundo año bateó para .342 y en los siete años que tiene en las mayores ha registrado cinco campañas de al menos .300 de promedio.
Su poder también está presente y con siete campañas de más de 14 cuadrangulares, incluyendo tres consecutivas de al menos 25 vuelacercas, su fuerza con el madero está más que demostrada.
Además, bateando generalmente en la parte baja de la alineación, Canó también ha probado ser un gran productor, con dos temporadas en línea de más de 100 impulsadas, incluyendo 118 en el 2011.
De por vida, Canó tiene un promedio de .308, con 144 cuadrangulares y 621 remolcadas en el inicio de una carrera que solo ha mostrado mucho brillo.
En el plano defensivo, mientras tanto, Canó ha demostrado estar por encima del promedio y tiene un Guante de Oro que lo avala.
Del otro lado aparece Pedroia, quien al igual que Canó también ha tenido un impacto profundo en el éxito de su equipo, los Medias Rojas de Boston.
Pedroia tiene un premio al Jugador Más Valioso en su bolsillo, un Novato del Año, un Bate de Plata y dos Guantes de Oro.
Asimismo, ha ido tres veces al Juego de Estrellas y tiene un título de hits en su repertorio, cuando pegó 213 en el 2008.
También ha liderado en anotaciones en dos oportunidades y dos veces en dobles.
Pedroia es un gran bateador de promedio, como indica su promedio de por vida de .305, aunque sus números de poder son casi la mitad de los de Canó (75 jonrones y 344 empujadas).
Y ahí, en el poder, es donde Canó es más determinante y donde lograr sacarle la ventaja a Pedroia como el mejor segunda base de las Grandes Ligas.
Cara o cruz
Kevin Cabral
Robinson Canó es un pelotero más completo y con más potencial ofensivo tanto en el presente como en el futuro. Canó tiene más poder y capacidad de batear promedio”.
Carlos José Lugo
La batalla para definir quién es mejor entre Robinson Canó y Dustin Pedroia es muy cerrada, pero me quedo con el dominicano aunque está muy cerca”.
Ambos han demostrado en el corto tiempo que tienen en Grandes Ligas que son dos estrellas de mucho peso en el firmamento del béisbol y con futuros muy promisorios.
Canó enseñó sus herramientas temprano, estableciéndose como regular en su primera oportunidad en las mayores, en el 2005, cuando bateó para .297, con 14 cuadrangulares y 62 remolcadas en un año en el que terminó segundo en las votaciones para el premio al Novato del Año de la Liga Americana.
De ahí en adelante, Canó ha ido demostrando la capacidad con el madero que lo ha convertido en un multimillonario y en una de las piezas más importantes de los Mulos del Bronx.
En su segundo año bateó para .342 y en los siete años que tiene en las mayores ha registrado cinco campañas de al menos .300 de promedio.
Su poder también está presente y con siete campañas de más de 14 cuadrangulares, incluyendo tres consecutivas de al menos 25 vuelacercas, su fuerza con el madero está más que demostrada.
Además, bateando generalmente en la parte baja de la alineación, Canó también ha probado ser un gran productor, con dos temporadas en línea de más de 100 impulsadas, incluyendo 118 en el 2011.
De por vida, Canó tiene un promedio de .308, con 144 cuadrangulares y 621 remolcadas en el inicio de una carrera que solo ha mostrado mucho brillo.
En el plano defensivo, mientras tanto, Canó ha demostrado estar por encima del promedio y tiene un Guante de Oro que lo avala.
Del otro lado aparece Pedroia, quien al igual que Canó también ha tenido un impacto profundo en el éxito de su equipo, los Medias Rojas de Boston.
Pedroia tiene un premio al Jugador Más Valioso en su bolsillo, un Novato del Año, un Bate de Plata y dos Guantes de Oro.
Asimismo, ha ido tres veces al Juego de Estrellas y tiene un título de hits en su repertorio, cuando pegó 213 en el 2008.
También ha liderado en anotaciones en dos oportunidades y dos veces en dobles.
Pedroia es un gran bateador de promedio, como indica su promedio de por vida de .305, aunque sus números de poder son casi la mitad de los de Canó (75 jonrones y 344 empujadas).
Y ahí, en el poder, es donde Canó es más determinante y donde lograr sacarle la ventaja a Pedroia como el mejor segunda base de las Grandes Ligas.
Cara o cruz
Kevin Cabral
Robinson Canó es un pelotero más completo y con más potencial ofensivo tanto en el presente como en el futuro. Canó tiene más poder y capacidad de batear promedio”.
Carlos José Lugo
La batalla para definir quién es mejor entre Robinson Canó y Dustin Pedroia es muy cerrada, pero me quedo con el dominicano aunque está muy cerca”.
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