Cuando su rodilla izquierda sucumbió en enero - lanzando una pelota, entre todas las cosas - él pensó acerca de un incidente parecido que tuvo hace unos años.
"Lo primero que pasó por mi cabeza fue 'no otra vez, no otra vez, no otra vez'", Martínez recordó el martes en su primera entrevista desde que fue operado de su rodilla izquierda hace unas semanas. "Estaba golpeada, y lo primero que me vino a la cabeza fue la lesión del 2012. Fue dolorosa. La rodilla se me inflamó y nunca regresó a su normalidad.
"Yo decía '¿Por qué?' Sólo estoy tratando de prepararme. Si estuviese flojeando, está bien, sería otra cosa. Sólo estoy haciendo mi trabajo para ponerme en forma y ayudar a mi equipo a ganar".
Hasta que el cirujano ortopédico Dr. James Andrews vio la rodilla y cortó el menisco, Martínez temía que ésta sería una operación que le pondría fin a otra temporada. Tres semanas después, el venezolano tiene esperanzas de poder jugar el primer día de esta campaña.
"Todo parece estar yendo por buen camino", dijo Martínez. "Espero que todo se mantenga bien".
Martínez se presentó a los entrenamientos en Lakeland el lunes, cuando bateó 50 pelotas desde un tubo de goma--25 desde cada lado del plato. Poco a poco subirá esa cuenta cada día mientras aumente la intensidad de la maquina de trotar anti-gravedad en la que se ejercita. Ningún ejercicio le ha dado algún tipo de inflamación en su rodilla.
La esperanza de V-Mart es regresar a la acción del juego a tiempo para tener un número decente de turnos al bate. Mientras muchos bateadores consideran los entrenamientos primaverales muy largos para sus objetivos, afirmando que podrían estar listos en menos tiempo, Martínez tiene la tendencia de agotar más turnos al bate que la mayoría de los veteranos con el paso de los años.
"Saben, en mi carrera siempre tomo entre 50 70", apuntó, "pero soy el tipo de pelotero que necesita repeticiones para arrancar. Ya veremos. Pienso que si juego dos semanas todos los días, quizás llegue a ese punto de arranque".
Es una buena cantidad de trabajo después de una cirugía, pero los entrenamientos primaverales de Martínez han sido menos peligrosas que sus temporadas muertas.
"Sólo estaba lanzado la pelota con mi hermano en el frente de mi casa", explicó Martínez acerca de su lesión. "Cuando planté el pie, [la rodilla me sonó], me fui directo al piso…"
"Saben, estoy empezando a pensar no hacer nada [durante la temporada muerta]. Quizás me presente los próximos tres, cuatro años con 30 o 20 libras de sobrepeso, pero sano. Esta es la segunda vez. Como mencioné, hombre, esto no es divertido".
0 comentarios:
Publicar un comentario