El tenista español Rafael Nadal fue elegido
ayer “campeón de campeones” de 2013 por el diario deportivo francés
“L’Équipe”, distinción con la que sustituye al atleta jamaicano Usain
Bolt, reconocido el año pasado.
Nadal, presente en la gala celebrada en París, recibió el galardón de manos del también tenista Richard Gasquet, y se llevó un premio al que optaban de nuevo Bolt y, entre otros, el futbolista Franck Ribéry, el atleta Mohamed Farah, el piloto de Fórmula Uno Sebastian Vettel o el judoca Teddy Riner.
“París es la ciudad más importante de mi carrera, y recibir este premio aquí es muy importante para mí”, dijo Nadal en inglés, que definió 2013 como “un año muy particular, puede que el más bonito, lleno de emociones”.
“He disfrutado de cada instante todo lo posible”, prosiguió el mallorquín, que tras la lesión que le mantuvo apartado de las pistas siete meses confesó que ha trabajado mucho para volver a estar a la altura, y que añadió que sin el apoyo de todos los que le rodean “habría sido imposible llegar a ese nivel”.
El actual número uno rechazó ser “tan bueno” como para ser visto como un modelo para los demás, y se consideró “un tipo normal”: “Todavía vivo con mis padres, en mi misma ciudad. Hago lo mismo que hacía hace diez o doce años. Ser de Mallorca facilita las cosas. Hace bueno, la gente es simpática”, concluyó.
Como mejor deportista femenina mundial se destacó a la tenista estadounidense Serena Williams, que repite por segundo año consecutivo, y que en 2013 se ha hecho con once títulos, dos de ellos en torneos del Grand Slam.
El “Premio de Honor” recayó en el francés Fabien Barthez, ex futbolista reconvertido en piloto de Fórmula Uno, mientras que dentro del deporte extremo se distinguió al también francés FranÁois Gabart, vencedor de la pasada Vendée Globe, vuelta al mundo en solitario que cerró en 78 días, 2 horas, 16 minutos y 40 segundos.
“L’Équipe” comenzó la entrega de estos premios en 1946 al deportista francés que hubiera realizado la mejor actuación del año en cuestión, y desde 1980 incluyó la distinción “campeón de campeones” para el mejor deportista a nivel mundial, fuera o no de Francia.
Como deportista francés del año acabó en esta ocasión el jugador de baloncesto de los San Antonio Spurs Tony Parker, que consideró que este honor se debe al triunfo de la selección gala el pasado septiembre en la final del campeonato de Europa.
Nadal, presente en la gala celebrada en París, recibió el galardón de manos del también tenista Richard Gasquet, y se llevó un premio al que optaban de nuevo Bolt y, entre otros, el futbolista Franck Ribéry, el atleta Mohamed Farah, el piloto de Fórmula Uno Sebastian Vettel o el judoca Teddy Riner.
“París es la ciudad más importante de mi carrera, y recibir este premio aquí es muy importante para mí”, dijo Nadal en inglés, que definió 2013 como “un año muy particular, puede que el más bonito, lleno de emociones”.
“He disfrutado de cada instante todo lo posible”, prosiguió el mallorquín, que tras la lesión que le mantuvo apartado de las pistas siete meses confesó que ha trabajado mucho para volver a estar a la altura, y que añadió que sin el apoyo de todos los que le rodean “habría sido imposible llegar a ese nivel”.
El actual número uno rechazó ser “tan bueno” como para ser visto como un modelo para los demás, y se consideró “un tipo normal”: “Todavía vivo con mis padres, en mi misma ciudad. Hago lo mismo que hacía hace diez o doce años. Ser de Mallorca facilita las cosas. Hace bueno, la gente es simpática”, concluyó.
Como mejor deportista femenina mundial se destacó a la tenista estadounidense Serena Williams, que repite por segundo año consecutivo, y que en 2013 se ha hecho con once títulos, dos de ellos en torneos del Grand Slam.
El “Premio de Honor” recayó en el francés Fabien Barthez, ex futbolista reconvertido en piloto de Fórmula Uno, mientras que dentro del deporte extremo se distinguió al también francés FranÁois Gabart, vencedor de la pasada Vendée Globe, vuelta al mundo en solitario que cerró en 78 días, 2 horas, 16 minutos y 40 segundos.
“L’Équipe” comenzó la entrega de estos premios en 1946 al deportista francés que hubiera realizado la mejor actuación del año en cuestión, y desde 1980 incluyó la distinción “campeón de campeones” para el mejor deportista a nivel mundial, fuera o no de Francia.
Como deportista francés del año acabó en esta ocasión el jugador de baloncesto de los San Antonio Spurs Tony Parker, que consideró que este honor se debe al triunfo de la selección gala el pasado septiembre en la final del campeonato de Europa.
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