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lunes, 8 de octubre de 2012

Baker no está cómodo por ventaja 2-0

SAN FRANCISCO -- No importa cuán bien lo hizo sentir Bronson Arroyo con su magistral actuación dominical ante los Gigantes de San Francisco, el dirigente de los Rojos de Cincinnati está lejos de sentirse cómodo con la victoria que los coloca al borde de ganar su primera serie de postemporada desde 1995. "Uno no va a estar cómodo hasta que todo termine", comentó Baker, luego de que Arroyo lanzara juego de un hit por siete entra-das y Cincinnati venciera a San Francisco 9-0 para tomar ventaja de 2-0 en la Serie de División de la Liga Nacional. "Hemos es-tado antes en esta situación. Es difícil tomar el último aire en todo. Ellos van a venir a tratar de ganar el tercero y cuarto juegos". Dusty Baker Thearon W. Henderson/Getty ImagesDusty Baker aún siente lejos el pase a la serie de campeonato pese a tener ventaja de 2-0 Con Johnny Cueto en situación de día a día tras una molestia en un costado, los Rojos buscan ganar algo de tiempo de recuperación para el derecho, que podría lan-zar el cuarto juego si pierden el martes, pero sería mejor tenerlo descansado para el primer partido de la serie de campeonato de la Liga Nacional. "Por eso es importante ganar y ganar pronto", comentó. "Con esta situación de Cueto, nos compraría algo de tiempo. También es importante tratar de terminar tan pronto como se pueda". El veterano piloto tuvo bastante aliento para dedicar unas palabras de elogio a su lanzador, quien mantuvo un juego perfecto hasta la quinta entrada y sólo permitió que dos corredores llegaran a las bases, ambos con dos outs. "Estuvo espectacular", comentó Baker. "Su curva estaba funcionando, estaba colocando muy bien su recta. Él y (Ryan) Hanigan trabajaron muy bien juntos y parecía que ambos estaban en la misma página. Una vez logramos anotar esas carreras tempranas, parecía lucir más fuer-te". La actuación de Arroyo también se ganó elogios del dirigente de los Gigantes, Bruce Bochy, quien se mostró frustrado con el desempeño de sus bates. San Francisco bateó en colectivo para .143 en los primeros dos partidos y fueron superados 14-2 en ca-rreras. "Fue un día difícil para los bateadores", dijo. "El tipo tiró muy bien. Mezcló sus pitcheos, cambió velocidades, localizó bien y nosotros no pudimos hacer nada. Es difícil meter a la fanaticada en el juego si no podemos poner gente en base". Arroyo no está seguro si este ha sido su mejor partido de la temporada, pero admitió que sí es uno de los que más ha disfrutado. El derecho fue miembro de la edición de los Medias Rojas de Boston que ganó la Serie Mundial en 2004 y también, del conjunto rojo que se eliminó en tres partidos ante los Filis de Fi-ladelfia en 2010.
"No creo que haya hecho nada especial, sí sé que todo me estaba saliendo bien", comentó. "Uno siempre dice que el que lanzó ese día es el mejor, pero en realidad no lo sé". El lanzador derecho retiró a los primeros 14 bateadores que enfrentó antes de que Hunter Pence rompiera el hechizo con un sencillo entre el derecho y el central en la quinta. Hasta ese momento, Arroyo sabía lo que estaba haciendo, pero estaba enfocado únicamente en la victoria. "Lo único que uno quiere, lo único que importa en una serie postemporada es ganar para tu equipo", señaló. "Ese es el pináculo. Un juego sin hits es improbable en estos momentos y de verdad, uno sólo quiere ganar, máxime en la posición en la que estamos". Cincinnati tendrá tres oportunidades en casa de ganar su primera serie desde que barrieron a Dodgers de Los Ángeles en la serie de división de 1995. De camino a casa, el piloto tenía otra razón para estar tranquilo. "Algunos bates han despertado, como por ejemplo Joey (Votto)", dijo sobre el inicialista que ayer conectó de 4-3 con dos anotadas. "Brandon (Phillips) comenzó a batear en esta serie. Parece que cuando alguien comienza a batear eso se hace contagioso al resto de la alineación". La tensión del tercer juego, la presión de jugar en casa, la condición de Johnny Cueto, fueron temas que Baker dejó para el lunes. En estos momentos, lo único que los Rojos querían era montarse en el avión de vuelta. "Parece que llevamos mucho tiempo fuera de casa", dijo Baker. "Necesitamos un poco de descanso. Va a ser una noche larga para nosotros y pienso que llegaremos a las 5:00 o 6:00 de la madrugada. Así que vamos a descansar y a preocuparnos por esas cosas más tarde".

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