MIAMI - Los juegos de exhibición han terminado, y ahora los Marlins de Miami del 2012 estarán verdaderamente a prueba.
Los Peces culminaron su pretemporada el lunes por la noche con una derrota por 5-2 en contra de los Yankees en el Marlins Park.
Luego de pasar seis semanas en el complejo de entrenamientos primaverales del club en in Jupiter, Florida, y dos juegos de exhibición en su nueva casa en contra de los Yankees, los Marlins están listos para la temporada regular.
En general, la primera primavera del manager venezolano Ozzie Guillén al mando de los Marlins fue todo un éxito.
El equipo evitó lesiones serias, y en general su desempeño fue mejor que su récord de 11-14 en la Liga de la Toronja.
Enfrentar a los poderosos Yankees en días consecutivos hizo sentir un ambiente de temporada regular en el nuevo estadio de los Marlins.
"Creo que el último juego de la primavera fue hace dos días, cuando estábamos en Jupiter", expresó Guillén, refiriéndose al juego contra los Mets el sábado en el Roger Dean Stadium. "Aquí, trato esos partidos como partidos reales.
"Obviamente, no significan nada para cualquiera de los dos equipos. Pero cuando juegas frente a tu gente, y hay mucha gente aquí, y estás en el estadio en el que vas a jugar todo el verano, sientes como si la temporada regular ya hubiera comenzado".
El derecho venezolano de los Marlins, Carlos Zambrano, lució descontrolado, otorgando siete pasaportes en su última apertura de la pretemporada.
"No estuvo bien", lamentó Guillén. "Dio siete bases por bolas, todas a bateadores zurdos. La última vez que tiró, en contra de los Astros, estuvo un poco descontrolado. Quizás fue porque lanzó en el nuevo estadio, en contra de Nueva York, ante una multitud, por primera vez aquí. Todavía creo que está lanzando la bola muy bien. Pero no hay duda de que tiene que tirar más strikes. Tiene que lanzarle mejor a los bateadores zurdos".
Zambrano, el cuatro abridor de los Marlins, lanzó 21 2/3 innings esta primavera. Por encima de todo, el venezolano está contento de haber finalizado la pretemporada en salud y ahora está listo para la campaña regular.
"Mi brazo se sintió bien", dijo Zambrano. "Lo más importante en los entrenamientos primaverales es trabajar en tu brazo y tu cuerpo. Eso es lo que hice. Preparé mi brazo para la temporada, y estoy listo ahora".
La temporada regular comienza el miércoles cuando los Marlins se enfrenten a los Cardenales.
"La prueba real comienza en dos días. Creo que el equipo está listo", indicó Guillén. "Los muchachos están muy entusiasmados. Me gustó mucho la manera en que jugaron esta primavera. Estoy contento por la forma en que se manejaron. Creo que todos estamos listos".
Desde el arranque de los entrenamientos primaverales, los Marlins han tenido sus momentos divertidos. Pero también han asumido este negocio con seriedad.
Tras añadir a los estelares José Reyes, Heath Bell, Mark Buehrle y Zambrano, los Marlins sienten que tienen las piezas necesarias para contender en la División Este de la Liga Nacional.
Guillén prometió asegurarse de que sus pupilos no olviden que la gente espera que los Marlins ganen.
"Se les está pagando mucho dinero para que hagan su trabajo", manifestó Guillén. "Si no pueden jugar, alguien más lo hará. Ellos integran el lineup. Yo lo armo, y [el coach de la banca] Joey Cora lo imprime. Eso es lo que hacemos aquí. Si juegas bien, estarás en el lineup. Si juegas mal, alguien más estará en el lineup. Este no es un trabajo fácil".
El estilo de Guillén es estar bien comunicado con sus jugadores y sacarles el mayor provecho. Pero ha dejado muy en claro que no andará con rodeos.
"Mi trabajo es, quiero sacar el mejor provecho de mis jugadores", exclamó. "Espero lo mejor de ellos todos los días. Me divertiré con mis jugadores. Pero si no juegas de la forma en que yo espero que juegues, no me importa quién seas. No me importa si eres Reyes, [Hanley] Ramírez, [Emilio] Bonifacio o cualquier otro.
"Si pienso que no estás jugando con el respeto que este juego merece, no estás jugando bien. Así de fácil. Como lo dije antes, respeto a todos mis muchachos. Tengo muy buena comunicación con ellos, pero tengo un trabajo por hacer. Mi trabajo es asegurarme que estos peloteros salgan al terreno y respeten el juego, respeten a los fanáticos".
Luego de pasar seis semanas en el complejo de entrenamientos primaverales del club en in Jupiter, Florida, y dos juegos de exhibición en su nueva casa en contra de los Yankees, los Marlins están listos para la temporada regular.
En general, la primera primavera del manager venezolano Ozzie Guillén al mando de los Marlins fue todo un éxito.
El equipo evitó lesiones serias, y en general su desempeño fue mejor que su récord de 11-14 en la Liga de la Toronja.
Enfrentar a los poderosos Yankees en días consecutivos hizo sentir un ambiente de temporada regular en el nuevo estadio de los Marlins.
"Creo que el último juego de la primavera fue hace dos días, cuando estábamos en Jupiter", expresó Guillén, refiriéndose al juego contra los Mets el sábado en el Roger Dean Stadium. "Aquí, trato esos partidos como partidos reales.
"Obviamente, no significan nada para cualquiera de los dos equipos. Pero cuando juegas frente a tu gente, y hay mucha gente aquí, y estás en el estadio en el que vas a jugar todo el verano, sientes como si la temporada regular ya hubiera comenzado".
El derecho venezolano de los Marlins, Carlos Zambrano, lució descontrolado, otorgando siete pasaportes en su última apertura de la pretemporada.
"No estuvo bien", lamentó Guillén. "Dio siete bases por bolas, todas a bateadores zurdos. La última vez que tiró, en contra de los Astros, estuvo un poco descontrolado. Quizás fue porque lanzó en el nuevo estadio, en contra de Nueva York, ante una multitud, por primera vez aquí. Todavía creo que está lanzando la bola muy bien. Pero no hay duda de que tiene que tirar más strikes. Tiene que lanzarle mejor a los bateadores zurdos".
Zambrano, el cuatro abridor de los Marlins, lanzó 21 2/3 innings esta primavera. Por encima de todo, el venezolano está contento de haber finalizado la pretemporada en salud y ahora está listo para la campaña regular.
"Mi brazo se sintió bien", dijo Zambrano. "Lo más importante en los entrenamientos primaverales es trabajar en tu brazo y tu cuerpo. Eso es lo que hice. Preparé mi brazo para la temporada, y estoy listo ahora".
La temporada regular comienza el miércoles cuando los Marlins se enfrenten a los Cardenales.
"La prueba real comienza en dos días. Creo que el equipo está listo", indicó Guillén. "Los muchachos están muy entusiasmados. Me gustó mucho la manera en que jugaron esta primavera. Estoy contento por la forma en que se manejaron. Creo que todos estamos listos".
Desde el arranque de los entrenamientos primaverales, los Marlins han tenido sus momentos divertidos. Pero también han asumido este negocio con seriedad.
Tras añadir a los estelares José Reyes, Heath Bell, Mark Buehrle y Zambrano, los Marlins sienten que tienen las piezas necesarias para contender en la División Este de la Liga Nacional.
Guillén prometió asegurarse de que sus pupilos no olviden que la gente espera que los Marlins ganen.
"Se les está pagando mucho dinero para que hagan su trabajo", manifestó Guillén. "Si no pueden jugar, alguien más lo hará. Ellos integran el lineup. Yo lo armo, y [el coach de la banca] Joey Cora lo imprime. Eso es lo que hacemos aquí. Si juegas bien, estarás en el lineup. Si juegas mal, alguien más estará en el lineup. Este no es un trabajo fácil".
El estilo de Guillén es estar bien comunicado con sus jugadores y sacarles el mayor provecho. Pero ha dejado muy en claro que no andará con rodeos.
"Mi trabajo es, quiero sacar el mejor provecho de mis jugadores", exclamó. "Espero lo mejor de ellos todos los días. Me divertiré con mis jugadores. Pero si no juegas de la forma en que yo espero que juegues, no me importa quién seas. No me importa si eres Reyes, [Hanley] Ramírez, [Emilio] Bonifacio o cualquier otro.
"Si pienso que no estás jugando con el respeto que este juego merece, no estás jugando bien. Así de fácil. Como lo dije antes, respeto a todos mis muchachos. Tengo muy buena comunicación con ellos, pero tengo un trabajo por hacer. Mi trabajo es asegurarme que estos peloteros salgan al terreno y respeten el juego, respeten a los fanáticos".
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